“Todo es negativo con respecto a las urnas electrónicas”, aseguró la jueza federal con competencia electoral María Romilda Servini.
La elección PASO de este domingo en CABA, donde se votaron cancidatos a jefe de gobierno porteño y cargos legislativos, fue un descontrol de principio a fin, un malentendido que duró desde las 8, cuando se habilitaron las mesas, hasta las 20, cuando finalmente cerró la última de las máquinas de voto el ectrónico.
“Todo es negativo con respecto a las urnas electrónicas. Habrán andado bien en Salta, pero son 800 mil personas las que votan, acá (en CABA) más de dos millones”, disparó este martes la jueza federal con competencia electoral María Romilda Servini en relación al despropósito que se vivió en la capital de la Argentina a la hora de votar cargos comunales.
En diálogo con AM750, Servini expresó su enojo con la situación producida en las PASO y reveló que las máquinas que aportó la empresa Magic Software Argentina “no estaban probadas” y que hasta mandaron máquinas “sin cable”.
En ese marco, Servini contó que el fiscal de turno recibió más de 300 denuncias de personas que se quejaron del proceso electoral y que en algunos casos los votantes estuvieron “hasta dos horas parados” y algunos se retiraron.
Por otra parte, aseguró que ella no recibió denuncias previas a los comicios y recordó la renuncia del exdirector electoral porteño Ezio Emiliozzi, quien dimitió al cargo poco antes de la elección: “Tengo entendido que renunció porque había que firmar un nuevo convenio con otra institución para hacer una encuesta posterior. Si la hacen, les va a dar un desastre”, declaró la jueza.
Este lunes, Servini hizo una presentación ante la Justicia sobre las distintas denuncias que recibió respecto del proceso electoral y, en consecuencia, se llevará adelante una auditoría.