Site icon Primereando

Condenan a cuatro hijos de un represor por el robo a una víctima de la dictadura

La denominada “Patota de Aníbal Gordon” fueron condenados por el delito de lavado de activos y ahora los hijos del genocida Miguel Save deberán pagar más de 10 millones de pesos.

Marcelo Leonardo, María Natalia, María Eugenia y Ana María Save, hijos del genocida Miguel Save quien fuera integrante de la denominada “Patota de Aníbal Gordon” fueron condenados por el delito de lavado de activos y deberán pagar más de 10 millones de pesos cada uno de ellos.

Lo dispuso el Tribunal Federal N° 1 de Mar del Plata, que además ordenó que los inmuebles ubicados en Chascomús sean decomisados, y entregados a la Provincia. El juez Roberto Falcone ordeno el decomiso de los terrenos y estableció a que la Provincia “realice allí tareas vinculadas a la memoria sobre el terrorismo de Estado”, informó el portal 0223.

Save participó del secuestro y la apropiación de los bienes en la vivienda del militante uruguayo Alberto Mechoso Méndez, ocurrida en septiembre de 1976. El grupo paramilitar le robó al militante uruguayo alrededor de 2 millones de dólares, que luego -al menos en una parte- fue utilizada, por quienes conformaban la organización, para efectuar la operación de compra de los lotes ubicados en el barrio Parque Girado de la ciudad de Chascomús para desarrollar un proyecto inmobiliario de construir un “Boating Club”, que finalmente no se construyó.

En este sentido el Subsecretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos AiresMatías Moreno afirmó “quiero destacar el gran trabajo realizado por la querella de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia, en este primer juicio por lavado de activos vinculado con delitos de lesa humanidad, a partir del dinero robado a un desaparecido por parte de un integrante de la patota de la Banda de Aníbal Gordon”. 

“Es muy importante la cesión de estos terrenos a la Provincia para realizar tareas vinculadas a la Memoria, y así profundizar el camino trazado por el gobernador Axel Kicillof desde diciembre de 2019, en políticas de Memoria, Verdad y Justicia. Esto ocurre a pesar de que el gobierno nacional intenta negar los crímenes de lesa humanidad ocurridos durante la última dictadura”. 

La causa

El represor Leonardo Miguel Save, integrante de la patota que dirigía Aníbal Gordon que operaba en el centro clandestino “Automotores Orletti”, secuestró al dirigente uruguayo Alberto Cecilio Mechoso Méndez en el marco del Plan Cóndor en 1976, le robó más de dos millones de dólares y con ese dinero, compró estos terrenos en un barrio a la vera de la laguna de Chascomús, donde intentó construir un complejo residencial exclusivo.

En su alegato, la Subsecretaría de Derechos Humanos bonaerense, querellante en la causa Save, y la fiscalía habían solicitado condenas de entre 3 y 5 años de prisión para los hijos de Save, por entender que no podían desconocer la procedencia de ese dinero. 

Durante la investigación se determinó que la compra de los terrenos fue realizada a través de apoderados y nombres falsos. En el año 1999 el represor Miguel Save comenzó a realizar gestiones para poner a su nombre los valiosos terrenos. 

Tras su muerte, ocurrida en 2006, fueron sus hijos, hoy condenados, quienes continuaron con esa tarea. En el año 2008 y luego de varias maniobras irregulares, los hermanos Save pudieron escriturar las parcelas, que por decisión de la justicia, quedarán en manos de la Subsecretaría de Derechos Humanos provincial.

“El lavado de dinero es un delito permanente”, indicó el juez Falcone al leer el veredicto este mediodía.

Exit mobile version