Un testigo confirmÃģ a Thomsen como el que le pegÃģ dos “puntinazos” en la cabeza a Fernando

TomÃĄs Bidonde recordÃģ al rugbier “golpeando al chico que despuÃĐs fallece” y que “casi al final le pega dos patadas”, al tiempo que seÃąalÃģ a Ciro Pertossi como otro de los atacantes cuando BÃĄez Sosa estaba en el piso.

Con la voz quebrada, TomÃĄs Bidonde, testigo clave del hecho, identificÃģ a MÃĄximo Thomsen como uno de los que pegÃģ las patadas finales a Fernando. “Al final le pega dos puntinazos en la cabeza y despuÃĐs, ya en el suelo, lo agarra y le vuelve a dar patadas”, seÃąalÃģ.

El testigo contÃģ que esa noche asistiÃģ al boliche Le Brique, del que se retirÃģ porque había mucha gente. Estando frente al boliche se encontrÃģ con el final del ataque a Fernando a pocos metros. Consultado por quiÃĐn era el “líder” del grupo de rugbiers, el joven tambiÃĐn seÃąalÃģ a Thomsen como el que “parecía el nÚmero uno” por su “agresividad”.

Bidonde fue tambiÃĐn el primer testigo que mencionÃģ a Ciro Pertossi y a Bas Cinalli desde que comenzÃģ el juicio. “Le pegaba patadas en el cuerpo estando en el suelo”, dijo sobre Pertossi. A Cinalli lo había identificado en rueda de reconocimiento como quien le pegÃģ antes de que caiga al suelo.

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Iniciativa en el Senado para prevenir la Muerte SÚbita

La propuesta estuvo a cargo del senador provincial de la UCR Gustavo De Pietro, quien explicó que la “la norma nacional define a la resucitación cardiopulmonar (RCP), como las maniobras que están destinadas a la oxigenación inmediata de los órganos vitales; la desfibrilación, a las maniobras de RCP a las que se le incluye un desfibrilador externo automático (DEA)”.

“Creemos que es necesario y vital aplicar este sistema de prevención en los espacios públicos y privados de acceso público y masivo; asimismo, consideramos de suma importancia promover la accesibilidad de toda la población a la resucitación cardiopulmonar y a la desfibrilación”, manifestó el legislador provincial.

En el mismo sentido, y a los efectos de facilitar la prevención buscada, “los DEA deberán estar instalados en lugares de fácil acceso para su utilización ante una situación de emergencia, y su ubicación, claramente señalizada, así como las instrucciones de uso de los DEA deberán ser colocadas en lugares estratégicos de las dependencias y espacios establecidos, visibles y diseñadas en forma clara y entendible para personal no sanitario”, concluyó De Pietro.

Además resaltó importancia de implementar éstos recursos en el territorio bonaerense para reducir la morbimortalidad súbita de origen cardiovascular.

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