El oficialismo consiguió que avanzara la iniciativa para girarla al Senado, gracias al apoyo del peronismo dialoguista y bloques provinciales, mientras que el Frente para la Victoria mantuvo su rechazo.
A las 8:35 de la mañana, el proyecto de ley enviado por el gobierno de Mauricio Macri obtuvo la media sanción por 165 votos afirmativos contra 86 en contra, y tras el tratamiento en particular será girado al Senado.
En paralelo a la sesión, los diputados participaron de reuniones para corregir la iniciativa junto a sus pares del oficialismo y funcionarios del Gobierno, entre quienes se encontraban el secretario de Finanzas, Luis Caputo; el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, y el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, según pudo saber NA de fuentes parlamentarias.
A las 8:20 de la mañana, el último orador de la jornada, el radical Mario Negri, presidente del interbloque Cambiemos, fue el encargado de defender la iniciativa del Gobierno y destacó que sobre 19 artículos se hayan producido 11 modificaciones con los aportes de los bloques opositores.
"Siento una enorme satisfacción de poder demostrar que el consenso es posible, aun entre los que competimos, cuando lo que nos une es un problema que nos abarca a todos", subrayó el legislador.
Sostuvo que el gobierno de Cambiemos "viene a resolver un problema en un contexto de debilidad, porque el país sufre una sentencia firme en contra, en un tribunal al que fue a pleitear voluntariamente, con el mismo estudio", en lo que fue una crítica a las administraciones kirchneristas.
"Les guste o no les guste despilfarraron la plata de los argentinos", aseveró Negri, en alusión a los gobiernos kirchneristas, y afirmó, ya a plena luz del día: "Esta noche se termina la idea fundacional de que el país empieza cuando yo llego".
Antes de Negri, tras un largo repaso de la historia de la deuda argentina, el presidente del bloque del Frente para la Victoria-PJ, Héctor Recalde, resaltó que el proyecto de ley viola "los principios básicos de renegociación de la deuda soberana" establecidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y refrendados por el Congreso argentino el año pasado.
"Si la estrategia neoliberal avanza, se producirá una severa limitación a la autonomía de la política económica del país", vaticinó el jefe de la bancada kirchnerista y advirtió sobre los "posibles reclamos judiciales de los acreedores reestructurados en 2005 y 2010".
"Fue una muy mala negociación", concluyó Recalde.
En representación del bloque massista, la diputada Graciela Camaño cuestionó al kirchnerismo, reivindicó la "hoja de ruta" planteada por el exministro Roberto Lavagna tras el canje de la deuda de 2005 y justificó su voto a favor al señalar que el proyecto del gobierno de Macri significa "sacar a la Argentina del Veraz", porque se está pagando un juicio que se perdió.
"Ahora todos somos corderitos pero el pueblo ha tenido la inteligencia de ponernos como estamos", dijo Camaño señalando a las bancas y agregó: "Este proyecto es el emergente de esa coincidencia, que ya no la hace el oficialismo en soledad. Y Nosotros vamos a honrar esa disputa política".
En la tarde del martes, Bossio había justificado su apoyo en disidencia a la iniciativa y cuestionó a quienes "apuestan al fracaso" del gobierno de Mauricio Macri.
"Nosotros no apostamos al fracaso, porque quien apuesta al fracaso de un gobierno apuesta al fracaso de todos. Eso nos decía Néstor Kirchner sobre quienes apostaban al fracaso del primer canje de la deuda", planteó el referente del Bloque Justicialista, que fue director de la ANSeS durante el gobierno de Cristina Kirchner y como diputado abandonó este año el bloque del Frente para la Victoria-PJ.
Con la media sanción, el proyecto será girado al Senado, donde este mismo miércoles ya empezaba a tratarse en comisiones con la presencia del ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay.