La gobernadora de Buenos Aires quiere que sea Guillermo Montenegro el candidato de Cambiemos en Mar del Plata. Por su parte, el intendente Carlos Arroyo afirmó que no se baja de la pelea y dijo que podría competir por adentro o por afuera del oficialismo. La grieta, al rojo vivo.
"¡Hoy comienza todo!", escribió en las redes Montenegro, luego de un acto que reunió a la propia tropa. Con esa consigna lanzó la fundación Pensar en Mar del Plata. Sobran las palabras: el dirigente macrista está dando sus primeros pasos para ser candidato en la ciudad balnearia.
Además, se sabe que Montenegro cuenta con el aval de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, quienes además ven con desagrado a Arroyo.
Sin embargo, todo indica que será una interna caliente. El propio Arroyo chicaneó a Montenegro: "No lo conozco. Creo que se presentó por otro distrito y perdió". Además, el alcalde dejó trascender que podría ir por afuera de Cambiemos. Lo que dejó claro es que no se bajará de la disputa de 2019.
Además, Arroyo cuestionó esta semana al gobierno por el tarifazo en los servicios públicos. Esa política está golpeando duramente sobre la actividad local. Mar del Plata presenta los peores indicadores nacionales en relación al desempleo, la pobreza y la indigencia. "Son indicadores que dependen de la economía nacional", advirtió Arroyo.