“Es muy duro entrar y no encontrar a mis compañeros”
A casi tres meses del trágico 2 de agosto y luego de una votación unánime que incluyó padres, maestros y auxiliares, la Escuela N° 49 de la localidad bonaerense de Moreno abrió sus puertas nuevamente y retomó las clases.
Hernán, compañero de la vicedirectora Sandra Calamano y el auxiliar Rubén Rodríguez, fallecidos por una exploción producto de una falla en la instalación de gas del establecimiento, lamentó: "Tengo sensaciones encontradas. Tristeza por llegar y que no esté Rubén para abrirnos las puertas ni Sandra para darnos los 'buenos días'. Por otro lado, alegría porque volvemos a una escuela segura y arreglada".
En este sentido, remarcó la tristeza que lo invade porque el resto de las escuelas de Moreno "siguen sin estar arregladas" pero luchará para que sean refaccionadas y nadie más "pierda la vida como pasó con Sandra y Rubén".
"Los chicos tienen muchas sensaciones. Algunos temor, otros lloran, otros entraron con alegría. Por eso están siendo acompañados por grupos de psicólogos", dijo conmovido, y agregó: "En lugar de entregar viandas en la capilla en frente de la escuela, vamos a hacerlo en el comedor. Van a comer acá dentro de la escuela con nosotros".
Por último, aclaró a Crónica TV que solo 15 escuelas están funcionando con completa normalidad en la localidad. "La idea es seguir luchando, queremos que todos estén seguros con normalidad. Las autoridades llaman 'normalidad' a que esté asegurado el patio. ¿Las aulas, los baños y los comedores?", se preguntó.
"No queremos que haya más muertes en ninguna escuela de la Provincia de Buenos Aires", concluyó.