“Con la legalización del autocultivo de cannabis medicinal, nos sentimos escuchadas por el Estado”
“Nos sorprendió que saliera en este 2020” afirma Claudia Pérez, integrante de la Comisión Directiva de Mamá Cultiva Argentina, sobre el decreto firmado por Alberto Fernández que modifica la “restrictiva” y “excluyente” reglamentación del gobierno de Macri sobre la ley 27350 de cannabis medicinal aprobada en 2017.
En un diálogo vía zoom con Primereando, la madre cultivadora de la ciudad de La Plata celebró la nueva reglamentación que permite el autocultivo y habló de los avances respecto al reconocimiento de los derechos del acceso a la salud de las familias cultivadoras. Además, marcó las diferencias entre el gobierno de Cambiemos y el actual. “Hoy existe una voluntad del Estado de acompañarnos”. “Hace noches que no dormimos” relata sobre la emoción que les causó el anuncio del decreto presidencial que también garantiza la cobertura gratuita y el expendio en farmacias.
– ¿Cómo recibieron la noticia de esta nueva reglamentación sobre la ley que se aprobó en 2017?
– Habíamos tenido una reunión con los Ministerios de Salud y de Seguridad a principios de año. Después sobrevino la pandemia y se complicó el avance. Pero hace cuatro meses atrás, el Ministerio de Salud nos alcanzó un borrador de la reglamentación para que nosotras le hiciéramos sugerencias y aportes. Se los hicimos y lo devolvimos. Hace cuatro meses que estábamos esperando, pero sinceramente nos sorprendió que entrara en el 2020.
– ¿Cuál es la importancia de los alcances de la nueva reglamentación del uso de cannabis medicinal?
– Es una deuda que viene a resolver lo inmediato y lo urgente, que tiene que ver con las familias que estamos ejerciendo nuestro derecho a la salud por medio del autocultivo dejemos de estar en peligro de ir presas. No olvidemos que una persona que cultiva marihuana puede ir de 4 a 15 años de cárcel. La persona que encuentra una mejoría o de su calidad de vida vuelve a deteriorarse en su tratamiento. Es lo que más nos desvelaba. Además, con la nueva reglamentación, se amplían más patologías, se deja de considerar solamente a la epilepsia refractaria como patología tratable con marihuana, lo amplía a las patologías que el médico considere. Las formas de acceso gratuita para aquellas personas que no cuenten con una obra social, expendios en farmacia con preparados magistrales y la capacitación al área de Salud. Las familias llegan a la consulta y es muy importante que los profesionales de la salud estén a la altura para poder acompañarlos.
– ¿Sienten que fue un reconocimiento a la lucha y militancia que vienen impulsando?
– Este reclamo empieza en 2016 cuando todas las personas veníamos expresando en qué nos venía ayudando la planta. Con esta reglamentación, fue sentirnos escuchadas. Sentimos que resuelve lo urgente. No solo nosotras, la población en general, porque es mucha la gente que está aliviando su salud con la planta.
– ¿Qué diferencias ven en su relación con el Estado a partir de la salida de Cambiemos y el actual gobierno?
– En el 2017, cuando sale la ley, empezó una campaña contra las drogas donde se recrudeció la persecución a personas usuarias y cultivadoras. Veíamos notas de un narcotraficante con dos plantitas, todo muy mediático. No se escuchó la necesidad de nadie. Iniciado este año, tuvimos reuniones con distintos sectores y se veía una voluntad del Estado de acompañar. Un Estado que acompaña nuestro reclamo y lucha es lo que estamos viendo. Por algo esta respuesta”.
– ¿Cuáles son los desafíos que se abren con esta nueva herramienta? ¿Cómo piensan seguir trabajando?
– Nos queda la enorme tarea por delante para que esta nueva reglamentación no termine en letra muerta como sucedió con la ley que se aprobó en 2017. Queremos que se aplique de la mejor manera, que abarque a toda la población, que no quede en el acotado de un sector ya sea por su patología o por su situación socioeconómica. Lo bueno es que como ONG somos parte del Consejo Consultivo, así que como estuvimos para que saliera esta reglamentación, vamos a estar ahí para que la aplicación sea acorde a las nuevas demandas.