El fiscal federal Federico Delgado criticó duramente al Poder Judicial y denunció que fue perseguido por el gobierno de Mauricio Macri. En diálogo con el programa radial “Entre amigos”, el fiscal afirmo que la Argentina tiene un poder judicial “tan desgastado y percibido por la sociedad como alejado y corrupto”.
Respecto de la persecución que denunció por parte de Mauricio Macri, Delgado afirmó que “Entre el ex juez Claudio Bonadio, el ex jefe de la AFI, Gustavo Arribas y compañía, me armaron causas judiciales simplemente porque intenté hacer las cosas como mejor me salían. Nunca vi o escuche algo parecido a lo escandaloso que se hacía en la gestión de Cambiemos. Por el contrario y por lo menos por ahora, hemos suspendido el armado de causas”, reveló.
Más adelante, el fiscal opinó que “el sistema judicial tiene un problema estructural muy grave y necesita una regeneración global para que las instituciones estén cerca de la gente y nos mejore la vida a todos”, expresó.
En ese sentido, Delgado agregó, "Este esquema se expresa en el lenguaje de los hechos, está claro que la gente no cree en el sistema judicial y en las personas que tienen que administrarlo. Lo más cruel, es que termina siendo un incentivo para que se resuelvan los problemas por la fuerza, violentamente”, alertó.
"Tenemos que trabajar en cambiar las percepciones que, aunque parezca algo alejado de la gente, cosa de políticos o de elite, es algo de todos los días. Tiene que ver con nuestra vida, con el intercambio cuando compramos en el supermercado y tenemos que reclamar por algo o cuando la factura de luz no tiene el monto correcto”, afirmó.
Otro punto es que “es necesario visualizar como la arquitectura política, más allá de los gobiernos y dirigentes de turno, requiere una cuota de impunidad que sólo puede estar garantizada por el sistema judicial. Este resquebrajamiento y deterioro a lo largo de los años permitió que se fuera expandiendo, sumara nuevos protagonista como así también nuevos instrumentos para presionar a un adversario de turno”, afirmó el fiscal.
Por último, hizo referencia al lawfare. “Esto es usar los expedientes como fusil y para ello se requiere que las fojas tengan elementos legales pero muchos ilegales. La ley como un arma, son formalmente intachables, pero en su interior con gran contenido manipulado y viciado. Así se consolida la expropiación de la justicia y algo que es de todos me lo hago propia”, sentenció.