El gobierno nacional negocia con el FMI un acuerdo para destrabar el pago del préstamo que el organismo le hizo al macrismo para que pudiera ganar las elecciones de 2019. En total, llegaron casi 50 mil millones de dólares en dos años, que se usaron para fugar divisas.
Según el calendario acordado por el macrismo en 2022 Argentina debería devolver una cuota de 18 mil millones de dólares. Imposible de pagar. Es decir: el gobierno de Cambiemos firmó algo que sabía que nunca podría cumplir. ¿El FMI no sabía?
Según el presupuesto enviado por el ministro de Economía nacional, Martín Guzmán, en 2022 no habrá pagos al organismo internacional, por lo cual se da por hecho un acuerdo que aumente los plazos de la devolución del crédito. "Entraron 45 mil millones de dólares pero ni un dólar se usó para desarrollar infraestructura en el país", reconoció ayer Guzmán al anunciar que se construirán nuevos gasoductos.
Fue tan calamitosa la gestión económica de Macri, que Argentina tomó deuda por 100 mil millones de dólares, como nunca antes en un período tan corto, y no pudo evitar una fenomenal crisis económica que terminó con las chances del entonces presidente de acceder a la reelección. No solo eso: debió terminar su mandato con cepo ante el temor de una crisis económica todavía peor.