A apenas una semana de haber jurado al frente de la Secretaría de Seguridad de General Pueyrredón, Julio Razona, renunció a su cargo declarando, insólitamente, que "la Secretaría de Seguridad es un gran nido de corrupción". Junto a él abandonaron sus puestos los directores de área que lo acompañaron éstos siete días que formaron parte de la gestión política de Carlos Arroyo.

Con expresiones explosivas, pero sin un destinatario preciso, Razona tomó la insólita determinación de abandonar la cartera de Seguridad de la comuna en medio de rumores periodísticos de disconformidad con el alcalde PRO de General Pueyrredón.

Y es que si bien Carlos Arroyo aún no confirmó la noticia fue Alejandra Rubianes, directora de Políticas de Seguridad que trabaja junto a Razona, quien aseguró al portal informativo local "0223" que "la decisión ya está tomada debido a la "corrupción enquistada" en el área.

Hasta ayer la incertidumbre rondaba en torno a una supuesta reunión donde Julio Razona habría dado los motivos al secretario de Gobierno, Alejandro Vicente, y al propio intendente, Carlos Arroyo, de su dimisión al cargo.

Desde el medio periodístico afirman que el hombre elegido por Arroyo para la cartera de Seguridad habría pedido al intendente hacer una auditoría en el área y al no haber avances decidieron presentar la renuncia.

"Hace falta modificar todo en la Secretaría, es necesario que Arroyo tome consciencia", aseguró Rubianes.

Algunas versiones apuntan que el malestar del funcionario marplatense apunta a los hombres de la gestión anterior que aún permanecen en Seguridad, como Fernando Telpuk (jefe de la Policía Local) y Sergio Andueza (responsable del Centro de Montiroeo).

Sin embargo otros rumores mencionan que el Jefe comunal no estaría conforme con parte del equipo que habría conformado Razona y eso había motorizado la ruptura.

El escándalo recién comienza y la incertidumbre se adueña de la administración de Arroyo, mientras se aguardan definiciones.