El intendente de Magdalena vinculó a la Policía local con robos en nochebuena

“Resulta innecesario y no conveniente, la difusión de versiones inexactas, que puedan afectar o desviar la investigación, que están en manos de las autoridades que por ley corresponde” fueron las palabras del Comisario de la policía local, Ariel Beherán, al conocer la denuncia del nuevo Intendente de Magdalena, Gonzalo Peluso, que acusó "complicidad" policial en una serie de hechos delictivos.

Todo sucedió luego de que el intendente, electo por el Frente Cambiemos, Gonzalo Peluso, vinculara a la policía local con dos robos (y un tercer intento frustrado)ocurridos en los últimos días.

Estas declaraciones salieron a la luz luego de dos robos ocurridos en la noche del pasado 24 de diciembre, donde fueron víctimas el asesor de Seguridad municipal, Carlos Abraham y el Secretario de Hacienda, Andrés García.

En ambos casos, autores ignorados, sin forzar nada, se llevaron dinero y elementos de valor, aprovechando que los propietarios no se encontraban en sus domicilios.

Peluso afirmó además que los responsables "fueron a lugares puntuales y no revolvieron demasiado". Además, se mencionó que hubo un intento en la casa de la hermana del intendente, actual Directora de Desarrollo Humano, pero que el mismo fue impedido por la intervención de una vecina.

El alcalde trazó luego un oscuro panorama respecto a los recursos con los que cuenta en materia de seguridad. “Hay ocho patrulleros, pero ninguno está disponible porque todos tienen averías mecánicas graves”, reveló, agregando que de los 140 efectivos de la Policía Comunal que “figuran en la nómina, solamente están trabajando 20”.

Luego de conocerse dichas declaraciones, el comisario Ariel Beherán emitió un comunicado donde manifestó que el jefe comunal “prejuzgó sospechas inexactas con afectación institucional”.

Según el comisario de Magdalena, que había renunciado a su cargo el pasado 15 de diciembre, pero que aún continúa en funciones, porque todavía no se oficializó quién será su reemplazante, “cualquier prejuzgamiento ajeno a la causa judicial y/o sin conocimiento cabal de las respectivas pruebas existentes, puede resultar injusto, afectar indebidamente a las instituciones y preocupar a la comunidad”.

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