Los distribuidores despedidos de Bimbo llegaron hasta uno de los puntos más emblemáticos de La ciudad de Buenos Ares para  reclamar el pago de la indemnización y denuncian las condiciones de contratación en todas sus plantas.

Acompañados por un fuerte operativo policial, trabajadores a bordo de veinte camiones de esta empresa alimenticia llegaron hasta el Obelisco para reclamar la reincorporación de los 300 despedidos, el pago de las indemnizaciones y denunciar las políticas de acique que la empresa mexicana realiza.

A dos meses de despedir a un centenar de operarios, la panificadora Bimbo decidió dejar sin trabajo a poco más de 300 trabajadores que se ocupaban de la distribución de sus productores en los comercios minorías. Según informó Tiempo Argentino, los trabajadores, además de denunciar el despido, afirman que la empresa no les reconoce la relación de dependencia y que en algunos casos, les reclaman una deuda.

El delegado Guillermo Vargas, asegura que se trata no solo de “una nueva práctica en el mercado laboral que tiene que ver con intentar no pagar indemnizaciones” sino que también apunta a la destrucción del comercio minorista”.

Los más de trescientos trabajadores despedidos se ocupaban de abastecer a los comercios minoristas en los distintos lugares del país. Los trabajadores denuncian que los aumentos de más del 150% en los productos atenta directamente contra la comercialización. En este sentido, Vargas, confirmó que desde hoy hasta el lunes está abierta una negociación por el pago de las indemnizaciones y que en caso de no haber un acuerdo habrá bloqueos a las plantas.

Es el segundo despido masivo en la panificadora de origen mexicano en los últimos meses. Mientras el grupo empresarial se expande –en abril de este año compró La Salteña y es dueño de Fargo y Lactal– los trabajadores quedan en la calle. A finales de septiembre, la empresa despidió a cien operarios de su planta en Pilar, por presuntas bajas en la producción.