La titular del FMI se reunió con el presidente de River Plate. Obsequios de remeras del Club a forma de honor. Del hit del verano a regalos a los usureros del mundo.
La presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, fue recibida por el máximo dirigente de River Plate, Rodolfo D´Onofrio, antes que el millonario jugará su partido contra Belgrano de Córdoba en Núñez.
La nueva hincha honorifica de River posó para las fotos con una camiseta obsequiada por el presidente de la institución deportiva y luego se quedó para observar el encuentro en el que los millonarios se impusieron por 3 a 1.
Lagarde, quien fue recibida por el presidente Mauricio Macri se encuentra en el país para participar este lunes y martes de la primera reunión de ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20 en Buenos Aires.
En sus encuentros con la prensa, la titular del FMI habló de la “gran cantidad de talentos” que hay en Argentina y afirmó que “los primeros dos años del gobierno de Macri han sido asombrosos”.
Además, Lagarde, sentenció: “las autoridades económicas han logrado tanto en términos de política monetaria, de la reorganización del gasto público para hacerlo más eficiente, de reducir la presión impositiva, adoptar las reformas que permiten la libre competencia y alentar el desarrollo de talentos”.
“Ha hecho tanto en lo que se ha dado en llamar gradualismo, que no lo encuentro gradualista para nada”, defendió la titular del FMI y agregó que “el Gobierno ha sido profundo en las reformas” con “la decisión de lograrlo en un tiempo suficiente como para que las reformas sean sustentables”.
También defendió el endeudamiento masivo que ocurre desde hace dos años a afirmar que “una buena parte está en manos del mismo sector público, en pesos. Así que no hay una exposición masiva a los acreedores externos en bonos en moneda extranjera”.
En ese sentido argumentó que “la deuda en moneda extranjera con los acreedores privados alcanza a un 35% del PBI, un nivel que francamente no implica una carga demasiado pesada para la economía”. “No lo veo como un asunto para preocuparse”, insistió.
Cuando le preguntaron por la falta de inversiones extranjeras, Lagarde contestó con lo que parece ser un guiño hacia la reelección de Macri al indicar que “los inversores quieren tener la garantía de que habrá una continuidad en las políticas, que no habrá retrocesos de ningún tipo de las políticas actuales, para renovar su confianza en el país”.