"El kirchnerismo está preparado para recuperar el distrito" aseguró Matías Molle, al referirse a las contiendas electorales que se avecinan, desde el domingo próximo.

Molle acusó al actual jefe comunal, el massista Luis Andreotti, de "abandonar obras impulsadas por la Nación y la Provincia".

"Vivimos este proceso electoral con la ilusión de recuperar para el proyecto nacional la administración de este partido que tiene una fuerte tradición peronista. Sentimos que los vecinos tienen demandas que (Luis) Andreotti no puede cumplir porque eligió no coordinar con la Nación y la provincia", señaló Molle..

Y en ese sentido, fustigó al intendente de este partido de la zona norte del Gran Buenos Aires por elegir "victimizarse" ante la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador bonaerense Daniel Scioli.

"Andreotti eligió convertirse en punta de lanza del proyecto político de (Sergio) Massa y ponerse en víctima del oficialismo antes que coordinar políticas. El gobierno nacional financió obras que no fueron atendidas por el municipio y ahora se notan las consecuencias. Después de mucho tiempo, San Fernando se volvió a inundar", apuntó.

Integrante de una nueva camada de dirigentes kirchneristas del Gran Buenos Aires, quienes en estas PASO se presentan con aspiraciones de administrar varios municipios en el Conurbano, Molle aseguró que "hubiera preferido la conformación de una sola lista del Frente para la Victoria en San Fernando".

"Lamentablemente, no pudimos conformar la unidad para que todo el peronismo vaya unido a las PASO. De todos modos, en las elecciones generales, el kirchnerismo sumará más que el Frente Renovador", observó este militante de la Agrupación La Cámpora, que se medirá en una interna con Gustavo Aguilera, presidente del PJ local.

Molle nació en Mercedes, pero desde muy chico se trasladó a San Fernando, donde trabajó como jefe de la delegación de la ANSES de esa localidad; cuando los fondos de las AFJP pasaron al Estado (2009) pasó a desempeñar una gerencia de ese organismo previsional.

En el 2012, pasó a desempeñarse como director del RENAR, e implementó el Programa Nacional de Entrega de Armas de Fuego que lleva destruidas más de 150.000 armas, y desde esa experiencia observó que "la problemática de la inseguridad debe ser atendida desde la gestión de la conflictividad".

El puesto instalado por el Registro Nacional de Armas (Renar) funcionará hasta el viernes en Madero 2993, en el centro de jubilados Renacer, y desde el 27 al 31 de julio en Sarmiento 1068, en el Centro de Referencia (CDR).

Las armas podrán ser entregadas de 9 a 14 de manera anónima y a cambio el organismo otorga una retribución económica de entre 500 y 2.000 pesos.

En el momento de la entrega se toma el número de serie, tipo y calibre de las armas, que son inmediatamente inutilizadas con una prensa hidráulica y el proceso finaliza cuando el Renar destruye y funde el material en una planta siderúrgica.

Aquellas que estén relacionadas con procesos judiciales pendientes son separadas y quedan sujetas a los procesos administrativos que corresponden.

Por otra parte, personal del organismo está realizando charlas de concientización en los colegios acerca de los riesgos por tenencia y uso de armas de fuego.

La política de destrucción tiene como objetivo la eliminación total del arma de fuego y la imposibilidad de que vuelva al circuito y pueda ser utilizada ante situaciones conflictivas y violentas. El método argentino, que consiste en la inutilización, destrucción y fundición, es pionero en la región y recibió elogios del

Mercosur.

El Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego recibió en Nueva York el premio "Política del Futuro 2013", otorgado por la Oficina de Asuntos de Desarme de Naciones Unidas, el Consejo Mundial del Futuro y la Unión Interparlamentaria.

El Registro Nacional de Armas (RENAR) anunció ayer durante un acto oficial la inminente destrucción de 20 mil armas de distinto calibre y procedencia, algunas secuestradas durante operativos policiales, otras producto de entregas voluntarias.

De esta manera suman 292.366 las armas eliminadas desde 2003 y desde el organismo estimaron que antes de fin de año sacarán otras 80 mil de circulación.

Del acto, realizado en el Banco Nacional de Materiales Controlados (Banmac) del RENAR, participaron su titular, Matías Molle; el gobernador bonaerense, Daniel Scioli; el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; el ministro de Justicia de la Nación, Julio Alak, su par provincial, Ricardo Casal, y el secretario General de la Presidencia, Eduardo De Pedro.

“Esto ayuda a crear conciencia sobre el desarme. Que sepan los que tienen armas ilegales que es un pasaporte a la cárcel. Pero no queremos que se llenen las cárceles, queremos vaciar las calles de armas”, aseguró Scioli, secundado también por el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis.