Increíble, pero real. Laura Alonso deberá controlar que se cumpla el decreto firmado por Mauricio Macri que prohíbe que los ministros contraten familiares en la administración pública nacional. No parece ser la persona con mayor idoneidad para esa función: ella puso a su propia hermana, Soledad Alonso, en la Secretaría General de la Presidencia.

La hermana de la titular de la Oficina Anticorrupción cobra casi 30 mil pesos mensuales y todavía no se supo cuáles funciones cumple y cuál es su CV. Según informó Perfil, Laura Alonso aclaró que su pariente presentó un currículum en la Fundación Pensar y fue contratada… ¡para trabajar en el Estado!

Pero no todas son malas noticias para Alonso. Porque el decreto presidencial sólo abarca a los ministros nacional, por lo cual ella queda excluida como titular de la Oficina Anticorrupción.