El resbalón de Rabolini
En una entrevista en Todo Noticias, la presidenta de la Fundación Bapro, Karina Rabolini, cometió un fallido que muchos creen, maliciosamente, que en realidad devela la verdadera cara del sciolismo.
La esposa de Daniel Scioli se valió de la frase de Evita -en aquel discurso del 22 agosto de 1951 en donde rechazó ser candidata a vicepresidenta- la dio vuelta intencionalmente y terminó ponderando los honores en detrimento de la lucha política.
“Eva decía: dejo los honores pero no la lucha, yo digo al revés, dejo la lucha pero no los honores”, sentenció Rabolini dejando entrever que prefieren renunciar a los proyectos políticos en pos de acceder a grandes cargos o, bien, que no comprende del todo la palabra de la abandera de los humildes.
Consultada por el periodista Julio Blanck sobre si cambiaría mucho su vida si Scioli fuera presidente la "Claire Underwood" local, señaló que "no cree que en la diaria le cambie mucho" porque "es normal que a mí la gente me haga pedidos, que los ayude en cosas; y si son pedidos de la provincia de Buenos Aires tengo una facilidad para solucionarlo, es mucho más ágil que si me lo piden de otra provincia. Además después de los 7 años y medio al frente de la Fundación del Banco la verdad que he adquirido experiencia", por lo que concluyó "que la provincia es muy buena escuela para ser Primera Dama"
Y continuó: "Pero después no tendría ningún cargo político ni sería candidata a nada así que como Eva Perón dijo que ella renunciaba a los honores pero no a la lucha, entonces en mi caso va a ser al revés, yo voy a renunciar a la lucha pero no a los honores”.
De esta forma, Rabolini, ya entrando en el rol de Primera Dama, desfila por los canales de televisión "bajando linea" y ensalzando la gestión del actual gobernador bonaerense en su camino a la presidencia.