Hurlingham: Amenazaron a periodista que investigó a Acuña
“Nena, por qué no te dejás de joder con Acuña. ¿Vos querés ser boleta?” fue la expresión de la voz del otro lado del teléfono de Silvana Varela, a las 22.11 horas del domingo 8 de abril.
Silvana Varela inició, en 2012 una investigación, junto a Gonzalo Ucha, en la que se sospechaba de una firma vinculada al intendente de Hurlingham, Luis Acuña, y su familia. Esa firma es FASIEM SRL, y según consta en la investigación, sería una empresa creada a los fines de comprar inmuebles y automotores en el exterior.
Según consta en el Boletín Oficial, FASIEM S.R.L fue constituida el 15 de diciembre de 2005 y está conformada por María Azucena Echosor, diputada nacional por el Frente Renovador y esposa del jefe comunal; y los hijos del matrimonio: Fabrizzio Acuña, socio-gerente de la empresa y concejal de Hurlingham; Emiliano Acuña, edil en uso de licencia, trabajando para su madre en la Cámara de Diputados de la Nación; y Silvina Acuña, también empleada de Echosor.
En su momento Varela expresaba que “Se notaba que era una empresa que no tenía actividad real. Había muchas compras y pocas ventas”.
Fue en abril de 2014 cuando la investigación salió a la luz, tras el pedido de informes al Registro de la Propiedad de la Provincia, en el que se detectó que la empresa familiar escondía propiedades inmobiliarias y automotores en nuestro país, en Brasil y en Uruguay.
“Una vez que analizamos y chequeamos los vínculos de los inmuebles con los Acuña, publicamos la información en abril de 2014”, señaló.
A la par, el abogado Jorge Cancio, quien también actúa como defensor de familiares de las víctimas de mala praxis en Malvinas Argentinas, elevó la investigación a la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC), por considerar que podría estarse ante la presencia de delitos tributarios y lavado de dinero.
Tras algunos meses, la PROCELAC no sólo corroboró la existencia de los bienes, sino que agregó otras propiedades que los integrantes de la familia poseían de manera individual.
Al mismo tiempo, impulsó una denuncia penal federal contra los Acuña que recayó en el Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 1 de Morón, a cargo del juez Juan Pablo Salas, y en la Fiscalía de Sebastián Basso. Fue Salas quien, la semana pasada libró un exhorto a Brasil y Uruguay para que brinden información sobre las supuestas propiedades (se calcula que son 9, además de autos y camionetas) de los Acuña en esos países.
De la denuncia formulada se desprendió que existían motivos suficientes para cuestionar la real capacidad comercial de la firma FASIEM S.R.L, ya que su capacidad económica no se condecía con la actividad comercial real para adquirir la cantidad de bienes que tenía registrados a su nombre.
Sobre la amenaza y las dificultades que vive a diario, la periodista expresó: “El miércoles a última hora publicamos la nota sobre mi testimonial en nuestro sitio web. Sin embargo, a las pocas horas el servidor que sostiene la página fue hackeado. Prácticamente estuvimos 24 horas fuera de línea”, denunció Varela.