Cuidar los porotos
El panorama electoral en Merlo parece ser el más complejo de los últimos años. Con un Raúl Othacehé que corre el riesgo de quedar atado al estancamiento de Sergio Massa y un candidato de las entrañas del sciolismo que se presenta con optimismo y en crecimiento, el final de la película todavía es una incógnita.
Desde el sector de Gustavo Menendez se muestran muy confiados en su performance en los futuros comicios y se entusiasman con el crecimiento de la imagen positiva que el gobernador de Bueno Aires en esas tierras del oeste bonaerense.
Pero como en todo el conurbano, los pingos se ven en la cancha y para eso hay que defender voto a voto en cada una de las escuelas del distrito. Por ello desde Grande Merlo ya lanzaron una campaña para capacitar fiscales que puedan sostener esa tarea.
En las últimas horas desde el bunker naranja capacitaron a los primeros 800 militantes de distintas extracciones que fiscalizarán el acto eleccionario.
En el distrito se posan no sólo las miradas de los merlenses, sino de gran parte del arco de la política bonaerense. Se trata del municipio con más electores de la primera sección electoral, por lo que de su destino depende gran parte del futuro político de ese conglomerado en el que el massismo espera sus mejores resultados.