Mauricio juega la carta Juliana
Hay que recuperar la iniciativa perdida. Ese es el lema de Cambiemos que hace semanas sólo se muestra a la defensiva tratando de explicar los escándalos que los detuvieron en la campaña y también en las encuestas.
Para ello Mauricio Macri le pidió ayer a su mujer, la empresaria textil Juliana Awada, que salga a caminar y a mostrarse más comprometida con las actividades proselitistas del espacio. Es que de alguna manera Cambiemos necesita dar un vuelco y espera que sea de la mano de Juliana.
Ayer Awada se mostró con la postulante a gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal durante una recorrida por el partido de José C. Paz, en lo que fue su primera actividad de camapa de cara a los comicios de octubre.
Vidal y Awada recorrieron el Hospital Zonal de Agudos Gobernador Domingo Mercante y conversaron con vecinos y comerciantes en la plaza Manuel Belgrano de esa ciudad, informó el PRO en un comunicado.
La vicejefa de Gobierno porteña y la esposa de Macri estuvieron acompañadas por el candidato a intendente de José C. Paz del frente Cambiemos, Ezequiel Pazos.
Es la primera vez que Awada se muestra en una actividad proselitista y de esta manera se sumó a Karina Rabolini, esposa del candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, y Malena Galmarini, mujer del postulante del frente Unidos por una Nueva Alternativa (UNA), Sergio Massa, quienes tienen una mayor presencia en las campañas electorales de sus maridos.
Rabolini acompaña con frecuencia a Scioli e inclusive se muestra con dirigentes del Frente para la Victoria tanto en el territorio bonaerense como en la ciudad de Buenos Aires y en el interior del país.
Por su parte, Malena Galmarini no solo es funcionaria municipal de Tigre e hija de un matrimonio de dirigentes peronistas, Fernando "Pato" Galmarini y Marcela Durrieu, sino que tiene una activa participación en las recorridas de Massa y en los medios de comunicación.