Organizaciones kirchneristas y de izquierda se movilizarán mañana martes a las 18hs frente al edificio del Congreso para manifestar su rechazo a la derogación de la ley Cerrojo, que diputados de la alianza Cambiemos y de fuerzas aliadas intentarán aprobar en la sesión de esa jornada con la idea de encauzar el acuerdo con los fondos buitres.
La Cámpora, el Movimiento Evita, Nuevo Encuentro y otras
agrupaciones del kirchnerismo confluirán el martes a las 18.00 en
una jornada de protesta contra "el acuerdo con los fondos buitre",
cuyas consecuencias, según sostienen, "las va a pagar el pueblo".
Las agrupaciones de izquierda también se sumarán a lo que
denominan un "plan de lucha contra el endeudamiento y el ajuste",
aunque convocaron de manera separada al kirchnerismo.
Una fuente de La Cámpora destacó que la convocatoria
apunta a que "los diputados que van a entregar el futuro del país
tengan claro que gran parte de la sociedad piensa que la solución
es otra".
"El arreglo con los fondos buitre no lo va a pagar (Mauricio)
Macri, lo va a pagar el pueblo. El acuerdo, que se suma a la
devaluación y al tarifazo que ya hicieron, va a generar hambre.
Hoy queda claro cuando (Alfonso) Prat Gay dice que si no hay
acuerdo se va a producir un terrible ajuste", reprochó el
representante de la agrupación kirchnerista.
Uno de los integrantes de la mesa de dirección del Movimiento
Evita Gildo Onorato subrayó que el acuerdo dará luz verde a
un "nivel de endeudamiento que comprometerá el desarrollo futuro
de la economía y de las generaciones venideras", por lo que
confirmó que una nutrida columna del movimiento social liderado
por Emilio Pérsico será de la partida para acompañar el voto en
disidencia de los diputados kirchneristas.
En la misma sintonía, la organización Nuevo Encuentro de Martín
Sabbatella se volcará a la plaza del Congreso bajo la consigna "no
a los fondos buitre".
El legislador porteño y presidente de Nuevo Encuentro por la
Capital Federal, José Cruz Campagnoli, manifestó que el motivo de
la concurrencia será el de expresar que el "pueblo no está
dispuesto a regalar la soberanía".
Por el lado de la izquierda, la militancia comenzará a
aglutinarse en la plaza enfrentada al Congreso un poco más
temprano.
El diputado nacional del Partido Obrero Néstor Pitrola indicó que ese espacio hará su propio acto, separado del que plantea el kirchnerismo, e incluso del que prevén realizar otros partidos de izquierda.
Remarcó que a diferencia del llamado a una consulta popular por
parte bloque mayoritario del Frente para la Victoria, al que
consideró un "fraude" dado que "plantea pagarles un poco menos"
que el oficialismo, los diputados del Partido Obrero van a
plantear la "investigación de toda la deuda pública" y la
convocatoria a un referendo.
Según alertó, de prosperar la iniciativa del gobierno el país
va a "ir hacia un Rodrigazo", ya que "es un ciclo de endeudamiento
que va a conducir a un ajuste de características enormes".
El dirigente nacional del PTS Christian "Chipi Castillo", por
su parte, aseveró que "el pago a los buitres es una nueva vuelta
de tuerca de una deuda ilegitima e ilegal", que se agrava por "el
último fallo del tribunal norteamericano" que deja "abierta la
posibilidad de litigio de otros acreedores".
El MST (al igual que el PTS) llamó a congregarse frente al
Congreso a las 17 horas con el propósito de "levantar la voz en
contra" del acuerdo con los holdouts.
El exlegislador y dirigente nacional del MST, Aleandro Bodart, insistió en que el aval parlamentario que proyecta el gobierno va a "hipotecar al país como en el 2001" y abre la posibilidad de nuevos reclamos sobre el país", en sumas que podrían "llegar a los 400 mil millones de dólares".