El ex ministro de Economía de Menem y De la Rua reapareció después de largo tiempo y lo hizo dando consejos económicos al gobierno de Cambiemos, que atraviesa por estos días su peor momento desde diciembre de 2015.
Invitado por la señal TN, el exfuncionario renunció en medio del incendio de diciembre de 2001 se animó a acusar a los medios de comunicación de haberlo "proscripto", al tiempo que señaló a la clase política por haber orquestado contra él "una campaña de demonización".
"Hay gente muy preparada técnicamente desde el punto de vista económico pero nadie sabe sobre la historia argentina de los últimos 30 años para no cometer grandes errores", disparó y luego de eso se atrevió a decir que tendrían que hacerle "un monumento" por cómo manejó la economía en el peor año de la democracia argentina desde 1983.
Pese a pretender un monumento, el padre de la Convertibilidad se refirió al año 2001 para señalar lo negativo del actual plan económico. "Puede venir en unos años si sigue la política de endeudamiento", agitó y se ofuscó cuando el periodista Edgardo Alfano le recordó que como consecuencia de su tristemente célebre corralito "la gente sufrió mucho".
"Usted lo que sufrió fue la pesificación. La gente no sufrió con el corralito. A Duhalde lo convencieron De Mendiguren. Decidieron sacarse las deudas de encima. El corralito no le impedía el uso del dinero a la gente", cerró faltando claramente a la verdad y pasando por alto las limitaciones al uso del débito, la imposibilidad de sacar efectivo de los cajeros y las cuasi monedas, entre otras características de su plan de aquel entonces.