Durante la recorrida que hiciera el presidente Mauricio Macri en el Hospital de Niños de Tandil, fue escrachado por un grupo de manifestantes que lo insultaron. De inmediato un grupo de guardaespaldas rodeó al primer mandatario y evitó que algunas personas, así como la prensa, se acercaran al presidente.
Junto a él se encontraba el intendente de Tandil, Miguel Lunghi aliado de Macri y Vidal, quien debido a la incomodidad de ese momento, no pudo posar para una foto por la cantidad de personas que protegían de la gente al presidente.