"Más allá de este fin de semana, hay sectores sin agua hace mucho. ¿Cómo higienizamos si no hay agua? Es muy difícil todo. Hace 21 años vivo acá", describió Guillermo Torre, párroco de la villa 31, en una entrevista radial.
Torre habla del drama que se vive en un barrio popular porteño, ubicado a pocas cuadras de Casa Rosada. No tienen agua potable y viven hacinados. Así es díficil enfrentar la pandemia del coronavirus. Además, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta brilla por su ausencia.
"El principio explotó la demanda de alimentos, ahora se fue normalizando. No significa que todo esté bien. Se abrieron ollas populares", detalló.
Sobre la situación en la villa agregó: "Hasta ayer había 11 casos, todos por contacto estrecho. No hay gran circulación comunitaria", explicó. Y siguió: "Tenemos lugar en la parroquia para asistir a los abuelos pero no podemos comenzar porque no tenemos agua", cuestionó.