A la vez que en los últimos días los medios opositores y funcionarios de Juntos por el Cambio y la UCR destrozan al juez de la Cámara de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires Victor Violini por ordenar la excarcelación con prisión preventiva a una serie de presos en el marco de la pandemia, la ciudad de Nueva York liberó 900 reos "No violentos".
El alcalde Bill de Blasio lo anunció semanas atrás, luego de que se confirmaran una serie de contagios de guardias y presos dentro de la cárcel de Riker’s Island. Según informó el portal de Vice, esta cárcel también es la más conocida en la ciudad por su reputación de abuso y descuido en contra de los detenidos.
"Hay cerca de 200 casos confirmados cuando hace solo 12 días tuvimos el primero. En ese espacio de tiempo, hemos movido montañas para proteger a nuestros pacientes”, explicó vía twitter el médico a cargo dentro de las instalaciones de esta cárcel, Ross MacDonald.
Esto fue corroborado por el análisis de un grupo de ayuda, el cual explicó que la tasa de infección dentro de la cárcel es siete veces más alto que el de la ciudad de Nueva York, la cual está denominada como el epicentro de infección de todo Estados Unidos.
“Esta no es una crisis generacional de salud pública, sino una crisis de una magnitud que ninguna generación que vive hoy ha visto jamás. Es posible que nuestros esfuerzos frenen este crecimiento, pero como médico debo decirle que es poco probable. No puedo tranquilizarles de algo que solo desean que sea verdad”, agregó MacDonald.
En este contexto, grupos humanitarios comenzaron a llamar la atención de la ciudad para sacar a los presos más vulnerables de la cárcel, incluso antes de que el COVID-19 llegara dentro de cualquiera de estas instalaciones.
Por su parte, el médico de Riker’s Island, escribió que tratará de ayudar a todos los reos, sin embargo cree que es una situación muy difícil de controlar, por lo que también tendrán que hacer uso de los hospitales y sus instrumentos.
El número de liberados fue casi el triple de la cantidad anunciada el pasado viernes (375). La gente que fue considerada para liberación fueron personas de la tercera edad o que tenían enfermedades que los hicieran particularmente vulnerables al nuevo coronavirus, así como gente que fue detenida por ofensas no violentas o violaciones de libertad condicional.
Además, el intentende de Nueva Yotk explicó que aunque serían cientos los presos liberados, aquellos que fueron sentenciados por violencia doméstica no serían elegibles para quedar en libertad.
“Es una dinámica muy complicada, literalmente, nunca la hemos tratado antes. Estoy escuchando toda la información […] Pero quiero dejar muy claro que estoy tomando las decisiones finales, tomando en cuenta los consejos de todas estas fuentes diferentes y haciendo lo que creo que es lo correcto para esta ciudad”, agregó.
Vale remarcar que la medida se enmarca, además, dentro de las recomendaciones que dictó la Organización Mundial de la Salud en el marco de la prevención y lucha contra la pandemia coronavirus Covid-19.