Más pruebas del entramdo mafioso entre el macrismo y sectores de la inteligencia.
Tres funcionarios de María Eugenia Vidal y el intendente de La Plata, Julio Garro, ingresaron al menos en diez ocasiones a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) mientras avanzaba el “plan Gestapo”. Se trata de nuevas revelaciones que confirman el entramado mafioso que tuvo lugar en el macrismo, entre dirigentes de Cambiemos, sectores de la Justicia y el aparato de inteligencia. Nunca antes había pasado algo así en democracia.
Según informó El Destape Web, se trata del entonces ministro de Trabajo bonaerense, Marcelo Villegas, y del 1 y 2 de la cartera de Justicia, Gustavo Ferrari y Adrián Grassi, quienes junto a Garro se reunieron en distintas ocasiones con los jefes de la AFI, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, y con dos espías que también están imputados por ser parte de la reunión en el Banco Provincia: Diego Dalmau Pereyera y Juan Sebastián De Stéfano.
El dato, que surge del libro de ingresos a la central de inteligencia, desmorona la defensa de la exmandataria bonaerense y la compromete en la causa junto al expresidente Mauricio Macri. Las visitas coinciden con momentos clave de las causas que se impulsaron contra el gremialista Juan Pablo “Pata” Medina.
La información fue presentada este viernes por la interventora del organismo de inteligencia, Cristina Caamaño, en la causa que instruye el juez federal Ernesto Kreplak, quien investiga si existió una asociación ilícita entre funcionarios bonaerenses, espías y empresarios para armar causas contra el gremialista de la UOCRA Juan Pablo “Pata” Medina, tal como se desprende de la grabación de una reunión realizada el 15 de junio de 2017 en la sede porteña del Banco Provincia que fue hallada en la exSIDE.
Durante el macrismo, se desarrolló un sistema mafioso casi al borde de la democracia. Nunca antes había pasado nada igual. ¿Quedará impune?