Así lo afirmó el presidente del PJ bonaerense, en la localidad bonaerense de Los Toldos, al realizarse un acto-homenaje a Evita por su 103 natalicio.
En el acto de cierre de la jornada homenaje a Evita, a 103 años de su nacimiento, dónde estuvo junto al gobernador, Axel Kicillof, la vicegobernadora Verónica Magario y compañeras de la rama femenina del Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires.
Luego de realizar una recorrida por el Museo Provincial Casa Evita, Máximo destacó se refirió a la importancia de la “abanderada de los humildes”.
“Me pregunto si a Eva se le cruzó por la cabeza lo que iba a ser su historia más allá de su propia vida. Y creo que hubo un factor fundamental en ella que no sé si pensó en la historia y en el futuro y en cómo sería recordada. Pero sí pensó en la historia que había vivido, en las desigualdades que había vivido y actuó en el presente. Tenemos la tendencia de recordarla a Eva y asociarla a la palabra “pasión”, “corazón” pero también estaba la otra Eva, inteligente, cerebral, constructora política. Creadora del partido peronista femenino”.
“Muchas veces ha habido tendencia, desde las afueras del peronismo, de querer situar cierta cuestión: peronismo, evitismo, y así le vamos agregando “ismos” para que nos busquen dividir. Y fueron Eva y Juan y fue la gente particularmente porque creo que hasta ese 45 los dirigentes prácticamente que tenía el peronismo eran desconocidos. No estaban en los diarios, en los diarios estaban otros pero, hubo una unidad que le dio plafón a la dirigencia que fue la unidad de la gente y la unidad de lo que se buscaba. Y el cansancio de un pueblo de no tener derechos, de ser maltratado no sólo económicamente sino de ser maltratado humanamente”.
Y agregó, “como prueba, quizás más clara de ese maltrato fue lo que hicieron con Eva después de muerta y después del golpe a Perón….imagínense el odio de esos pocos que habían tenido que ceder sus privilegios ante la construcción de mayorías que habían hecho Eva y Juan”.
“Imagínense cuando algunos, conocedores de esta historia, sentimos y escuchamos en los grandes medios de comunicación que el gran problema de este país es el peronismo, cuando fue el que siempre sufrió las descargas de odio más duras habidas y por haber en este país. No sólo en el cuerpo de Eva sino en lo que sería un anuncio de lo que pasaría unos años después en miles de cuerpos de compañeras y compañeros desparecidos”, agregó.
“A partir del 25 de mayo de 2003, el año que viene ya hará 20 años, pudimos empezar a tratar, no sólo ya de vivir aquello que nos contaban, sino de poder construir un presente y poder prolongarlo hasta el futuro.”
“Creo que tenemos que ser fuertes y que tenemos que entender y comprender que el desafío que tenemos por delante es muy complejo y muy difícil. Y que nosotros necesitamos poco a poco que nuestro pueblo vaya recuperando su poder adquisitivo”.
“Muchas veces quieren enfrentar a los trabajadores formales que menos ganan con los compañeros trabajadores que tienen el salario anual complementario de las economías populares. No podemos dejar que nos enfrenten entre nosotros y entre nosotras. En todo caso, lo que está alto no son aquellos compañeros que son parte de políticas públicas necesarias, muchas veces, siempre casi, en los medios de comunicación, vilipendiadas, maltratados, maltratadas. Sino que lo que hay que subir son los salarios”
“Lo que no hay que romper, y les pido por favor en nuestros barrios, es la solidaridad entre el que tiene un trabajo registrado y entre el que no lo tiene. Demos la discusión todos juntos, adentro y buscando en esas verdades relativas una síntesis superadora para, realmente, entender lo que sucede”.
“Hemos visto como ha descendido la participación del trabajador y la trabajadora dentro de nuestro PBI. Y esto se ha hecho sin modificar una sola ley laboral. Esto sucede de hecho. Porque tienen las herramientas e instrumentos para hacerlo. Y creo que debe ser entonces cuando la organización de ciudadanos y ciudadanas, registrados o no en su trabajo, tiene que fortalecerse. Que esa es la gran dicotomía que hay porque sino muchas veces buscan enfrentarnos adentro, en nuestros barrios. Diciendo que hay uno que no trabaja y tiene tanta plata y hay otro compañero o compañera que por ahí tiene un trabajo registrado y tiene que ir a pelearla todos los días, a cumplir un horario. Dos horas de ida, dos horas de vuelta. A veces a sufrir el maltrato del patrón o que no le haga los aportes. Las historias de nuestra Argentina”.
“Entonces yo lo que les pido es que tengamos la firme convicción, que tengamos la voluntad y que sepamos que los debates políticos que tenemos que dar deben ser de cara a nuestra sociedad. Pero no sólo de cara sino integrando a nuestra sociedad a ese debate porque, cuando la gente participa se reduce el margen de error de nuestras dirigencias”.