Lula: “El fascismo será arrojado a la cloaca de la historia de donde nunca debió haber salido “
En su lanzamiento como candidato presidencial, el ex mandatario brasileño anticipó que mantendrá una política externa “activa y altiva” reforzando los bloques regionales como el Mercosur, Celac y el relanzamiento de la Unasur.
El ex mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) lanzó su candidatura presidencial para los comicios del próximo 2 de octubre, en los cuales estará acompañado como aspirante a vicepresidente por el ex gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin.
“Hay que restaurar la soberanía de Brasil y del pueblo brasileño”, afirmó Lula, quien defendió una mayor intervención del Estado en la economía, fustigó las privatizaciones del gobierno de Jair Bolsonaro y propuso restablecer la función social de las empresas públicas como motor del desarrollo, el cuidado del medio ambiente y la lucha contra el hambre.
“Hay que cumplir nuevamente la batalla contra el hambre. Todo lo conquistado fue destruido por el actual Gobierno. Es terrible, pero no vamos a desistir”, dijo el candidato, que también criticó la política neoliberal de que los salarios no logran superar a la inflación.
“Un pueblo que no puede comprar es un empresario que no puede vender”, dijo en su clásico tono convocando a la alianza productiva que marcó su período de gobierno (2003-2010).
“El fascismo será arrojado a la cloaca de la historia de donde nunca debió haber salido”, añadió en un mensaje dirigido a Bolsonaro y en el cual rescató que su gobierno, en caso de victoria, a partir del 1 de enero de 2023 invertirá en ciencia, educación, salud y cultura.
Por otra parte, Lula dijo que cree en la “lealtad” de su compañero de fórmula, quien fue su rival en las elecciones de 2006, en el marco de la alianza con ocho partidos con los cuales pretende una mayoría legislativa inédita y busca vencer en la primera vuelta electoral, para lo cual precisa el 50% más uno de los sufragios válidos, excluidos nulos y blancos.
“Ninguna diferencia del pasado, ni de ayer, ni las eventuales discordancias de hoy o de mañana servirán de razón, disculpa o pretexto para dejar de apoyar o defender con toda mi convicción la vuelta de Lula a la presidencia de Brasil y es con mucho orgullo que hago eso”, aseguró.