Ricos y desobedientes.
En Bariloche, el exclusivo country Arelauquen, que reúne a las familias más ricas de la ciudad, está en conflicto con una comunidad mapuche. No quiere cumplir un fallo de una jueza, que le pide que corra un alambrado porque esa propiedad está avanzando sobre tierra de los pueblos originarios.
“A esos indios no les damos nada”, es el planteo de los vecinos del countrie, que se niegan a cumplir con la demanda judicial.
“Nos querían cansar, a mi hermano le pegaron más de cuatro veces, lo pasaban por debajo de un alambre porque decían que andaba merodeando por el country, nos corrían los animales, alambraron detrás de su galpón”, aseguraron desde la comunidad, que viene reclamando hace 14 años.
El conflicto comenzó hace casi una década y media cuando ese barrio privado cerró el paso del camino que los integrantes de la Lofche José Celestino Quijada utilizaban cada día para ir al trabajo, la escuela y el hospital. Como el magnate inglés Joe Lewis, que se apropió del acceso a Lago Escondido. ¿Los ricos pueden hacer cualquier cosa?