El titular de la bancada del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados bonaerense, José Ottavis, salió a cuestionar a los dirigentes que rompieron el bloque kirchnerista en el Congreso nacional y si bien no mencionó nombres los acusó de "ser funcionales al macrismo".

Ottavis publicó una carta a través de la red social Facebook en la que acusó a los rupturistas de actuar "por intereses mezquinos, que nada tienen que ver con los intereses del pueblo que los votó".

"Con su corrimiento, terminan siendo funcionales al macrismo porque les otorgan garantías legislativas", advirtió el legislador al analizar la actitud que tomaron, entre otros, el ex titular de la Anses, Diego Bossio, al crear el "Bloque Justicialista" y separarse del FpV.

Además, abogó por "un peronismo abierto, que pueda congregar a todos los sectores de la población, a los trabajadores y al pueblo en general" y que, a la par, "luche por aquellos derechos y políticas de Estado que hoy están siendo destruidos por Cambiemos".

Finalmente, en su escrito advirtió: "Si sos peronista, sos kirchnerista. Y en este momento histórico, la única conductora y líder del pueblo, es Cristina" Fernández de Kirchner.

Debido a los despidos masivos en el sector público, la Asociación de Trabajadores del Estado, ATE, convocó al primer paro nacional en contra del gobierno de Mauricio Macri.

Los secretarios gremiales de todo el país se reunieron hoy y resolvieron convocar a la jornada de reclamo para el 24 de febrero.

A la causa principal de la convocatoria se le suma el pedido de aumento salarial.

Según aseguró el secretario general de ATE, Julio Godoy, los delegados resolvieron convocar a un paro nacional de trabajadores estatales nacionales, provinciales y municipales y la jornada será acompañada por movilizaciones en todo el país.

“El gobierno quiere reducir a la baja la discusión salarial condicionando a los trabajadores, porque al llevarnos a la mesa paritaria con 20.000 despidos es ponernos una pistola en la cabeza”, denunció, el gremialista en la conferencia de prensa que se realizó al término del encuentro gremial.

"Cachorro" Godoy arremetió contra el gobierno nacional y remarcó que es mentira que hay "ñoquis" en el estado, "es la justificación de Mauricio Macri para implementar los despidos masivos", aseveró el dirigente y agregó que "los trabajadores quieren trabajar y les ponen la policía en la puerta para no entrar como en el Ministerio de Cultura y la Dirección de Fabricaciones Militares, por ejemplo”, concluyó.

El aumento de las tarifas en el servicio eléctrico sigue sumando voces críticas.  En esta oportunidad llegaron desde los referentes máximos del radicalismo.

El diputado nacional y presidente del Comité de la provincia de Buenos Aires de la UCR, Ricardo Alfonsín manifestó la necesidad de sincerar la "situación tarifaria", dejando entrever la falta de claridad respecto del cuadro presentado por el ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, el último viernes.

"También hay que sincerar la relación contractual con las prestadoras de los servicios”, añadió Alfonsín y  agregó que "la ciudadanía debe saber qué hicieron las concesionarias con los recursos que recibían del Estado".

En el mismo sentido y haciendo referencia  la relación entre las empresas y la administración anterior, el diputado radical consideró que "se debe saber si las prestadoras de servicio  cumplían o no con sus obligaciones contractuales. Y si el gobierno anterior o los organismos reguladores cumplieron con sus obligaciones  de control a las concesionarias”.

Para concluir, Ricardo Alfonsín volvió a referirse a la necesidad de que los ciudadanos tengan la certeza de que los comportamientos  del estado y los particulares "se ajusten a la ley”.

El jefe del bloque PRO en la cámara baja, Nicolás Massot, defendió a su tío Vicente Massot, dueño del diario La Nueva Provincia acusado de participar en crímenes de lesa humanidad al tiempo que señaló que la última dictadura cívico – militar “no se supera con revancha” sino con “justicia para todos lados y de la misma manera”.

“Fue una etapa traumática que no se supera con revancha, con politiquería ni con negocios. Se supera con justicia, para todos lados y de la misma manera”, opinó en declaraciones al Cronista Comercial, el jefe de la bancada de diputados del PRO.

Por otra parte, al referirse a la situación de su tío, Vicente Massot, quien está doblemente imputado por haber participado del secuestro, la tortura y el asesinato de dos obreros gráficos de La Nueva Provincia y por haber colaborado, por medio de los editoriales del diario para llevar adelante el plan criminal de la dictadura, el joven Massot cuestionó al gobierno saliente y manifestó que la causa contra su tío “ha sido manipulada con fines de persecución mediática”.

En este sentido, el diputado del PRO criticó que los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner “hayan ocupado su atención en discutir los derechos humanos del pasado y no los del presente”.

“Estoy en contra de eso. Y en general de hacer política con la historia”, resaltó.

En este contexto, explicó que “por el momento los únicos fallos que hubo en las distintas instancias (contra su tío) han sido de falta de mérito. Así que hasta ahora la Justicia por suerte ha encontrado falaces, igual que nosotros, todas las acusaciones”.

En estos momentos la causa contra Vicente Massot se encuentra apelada en la Cámara Federal de Bahía Blanca y el juez federal, Claudio Pontet, quien había dictado la falta de mérito del empresario fue desplazado de la causa por el Consejo de la Magistratura por poner trabas a la investigación.

Meses después de su exilio público, que incluyó hasta el cierre de sus cuentas en las redes sociales, el exkirchnerista, exmassista y exkirchnerista nuevamente, Darío Giutozzi, reapareció en sociedad. Fue en La Rosada para mostrar su nuevo perfil político: macrista.

El exintendente de Almirante Brown se pintó de amarillo, llegó a Casa de Gobierno, de la mano del armador PRO, Emilio Monzó, y fue recibido por Mauricio Macri.

Giustozzi llevó a sus diputados nacionales que integran el grupo Compromiso Parlamentario por la Argentina, quienes se comprometieron a trabajar junto al Gobierno Naciona.

“Estamos muy satisfechos por esta muestra de madurez cívica, política y este apoyo a la gobernabilidad”, aseguró el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, quien participó de la reunión con los parlamentarios en Casa de Gobierno.

También asistieron el presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó; el viceministro de Interior, Sebastián García de Luca, y el diputado Nicolás Massot.

El vínculo entre los espacios fue tejido, con la paciencia de la araña, por Monzó que ya en noviembre buscaba la foto que formalizara la relación.

Acompañando a Giustozzi, participaron de la reunión Luis Lusquiños, Claudio Poggi, Alberto Roberti, José Orellana, Ivanna Bianchi, Sandro Guzmán, Eduardo Fabiani y Berta Arenas.

Giustozzi aseveró que desde Compromiso Parlamentario por la Argentina “hemos expresado la vocación de que por primera vez en Argentina desde la vuelta a la Democracia, las alternancias funcionan y cuentan con el apoyo del conjunto de la dirigencia”.

El ministro de Energía, Juan José Aranguren, afirmó  que "en principio" el Gobierno "no" prevé realizar este año una nueva revisión de las tarifas de la luz tras las subas dispuestas la semana pasada, del orden, en algunos casos, de hasta 900 por ciento.

"Hoy estamos en condiciones de decir que, con lo que hemos hecho, tenemos argumentos suficientes como para esperar a ver la evolución de la demanda. En principio, no tendríamos que estar haciendo otra corrección de las tarifas este año", dijo el funcionario.

La semana pasada, el ministro dio a conocer una serie de subas que suponen incrementos que van de 140 a 900 por ciento, según los casos.

Por otra parte, en cuanto al sector del gas, Aranguren dijo a Radio Con Vos que el Gobierno "no" tiene todavía una "fecha exacta" para definir aumentos en el precio. "Estamos trabajando, no tengo una fecha exacta para definir cuándo vamos a terminar, pero es un proceso similar al del sistema eléctrico", planteó.

En lo que fue una postal de fuerte respaldo al liderazgo de la ex presidenta Cristina Fernández, el diputado nacional Máximo Kirchner se reunió con los intendentes de Avellaneda y Berazategui, Jorge Ferraresi y Patricio Mussi, para conversar sobre la situación en los municipios.

En medio de la puja por el control del peronismo bonaerense, el diputado santacruceño se mostró con los intendentes “cristinistas”. Esta reunión encendió las especulaciones sobre el pronto regreso de Cristina Fernández a la escena de la política nacional, luego de haber dejado el poder el pasado 9 de diciembre.

En tanto, esta mañana el jefe comunal de Avellaneda afirmó: “La conducción de Cristina está intacta. A mi ningún vecino me pregunta por el PJ, me preguntan cuándo vuelve Cristina”.

“El Partido es una herramienta electoral, lo importante es el movimiento”, explicó Ferraresi en diálogo con El Termómetro Radio, en un clarísimo mensaje en medio del convulsionado clima dentro del peronismo. Del encuentro también participó el diputado provincial Juan José Mussi, padre del jefe comunal de Berazategui.

En tanto, el hijo de la presidenta estuvo presente en el Palacio Legislativo y mantuvo distintas reuniones con los legisladores nacionales del Frente para la Victoria, al tiempo que también mantuvo encuentros con los referentes de La Cámpora, Eduardo “Wado” de Pedro y Andrés Larroque.

El legislador oriundo de Santa Cruz siguió con atención los cruces entre el sindicalismo y el Ejecutivo nacional de cara al arranque de las negociaciones paritarias por el “techo” que intenta imponer el gobierno, al tiempo que junto a Axel Kicillof repasó el tema tarifas y distintos informes económicos sobre la baja del consumo popular en distintas áreas.

Con el aumento todavía fresco, Edenor no tardó ni 24 horas en salir a pedir más recursos. A pesar de la furiosa transferencia de recursos que convalidó el tarifazo de la luz, la distribuidora salió a marcar la cancha y advirtió que el nuevo cuadro tarifario aún no cubre sus expectativas.

"Desde ayer estamos con el nuevo cuadro tarifario. Todavía, con estos valores no se cubre el costo de generación de electricidad", afirmó hoy el vocero de la compañía, Eduuardo Mirabelli,

Así, la empresa distribuidora dejó clara su postura de presionar por nuevos ajustes o mayores subdisios estatales que cubran ese "faltante de fondos".

"Lo que están haciendo es eliminar un factor de injusticia que beneficiaba a los habitantes del Gran Buenos Aires y Capital Federal, que es el distrito con mayor ingreso per cápita", expresó el vocero de Edenor en declaraciones a A24.

Mirabelli explicó que por el congelamiento de tarifas que impuso el kirchnerismo, la empresa hace 16 años que no distribuye dividendos entre sus accionistas, por lo que destino sus ingresos a inversiones y pago de sueldos.

"Siempre estuvimos corriendo detrás de la demanda. Vamos a tratar de acelerar ahora con un régimen más cercano a la realidad. Probablemente haya cortes, pero menores, el año siguiente menos y el otro año tal vez ya no", dijo el vocero.

Mirabelli precisó que existen cinco grandes grupos de clientes residenciales con dos extremos promedio: los de 1.000 kilovatios o más, que es un consumo medio-alto; y los de 150 kilovatios, que es una demanda baja para una vivienda que no tiene más que una heladera y un ventilador.

En los 500 kilovatios rondan departamentos de 2 o 3 ambientes en los que viven una pareja y un hijo, con acondicionador de aire, una computadora, un microondas, una heladera y un televisor, por ejemplo.

"El consumo promedio en la Ciudad de Buenos Aires se ubica entre 300 y 500 Kw. Hay más de 7000 edificios en los barrios porteños que son totalmente eléctricos", dijo el vocero de la distribuidora.

El gobierno nacional descolgó los cuadros del ex presidente Néstor Kirchner y del ex jefe de Estado de Venezuela, Hugo Chávez, que estaban en el primer piso de la Casa de Gobierno y los trasladó al Museo del Bicentenario, contiguo a la Casa Rosada.

Periodistas acreditados de la Casa de Gobierno fueron testigos del momento en que un empleado, que dijo pertenecer a la Secretaría General de la Presidencia, daba instrucción a un operario de bajar ambos cuadros para llevarlos al museo contiguo a la Casa Rosada de modo de "darle otra impronta" a ese pasillo, cercano al Salón de las Mujeres del Bicentenario.

Desde la oposición llovieron críticas por el gesto y su impronta simbólica. El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, rechazó la iniciativa: "Me parece una provocación innecesaria que bajen los cuadros de Chávez y Néstor, hay temas más profundos para discutir"‎.

En ese mismo sentido se pronunciaron el dirigente del Frente para la Victoria, Gustavo López, y el ex jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Lopéz sintetizó: "Mientras nosotros sacábamos el cuadro de Videla, Mauricio Macri descuelga el de Néstor, me quedé sin palabras".‎ Por su parte, Aníbal aseguró que "la memoria de Néstor Kirchner está viva en todos los que reconocemos su enorme sacrificio por la Patria".

Asimismo, el ex intendente de Lanús, Dario Díaz Pérez, sostuvo: "Por más que oculten los cuadros, Néstor y Chávez seguirán controlando e inquietado a los poderosos desde el corazón de los humildes".

Los cuadros habían sido puestos allí el año pasado durante la gestión de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien solía brindar sus discursos desde ese pasillo, flanqueada por ambos cuadros.

En un contexto de despidos masivos en el sector público, el funcionario PRO expresó que  “No podemos tener un estado enorme que nos traiga déficit.”

En referencia a la discusión que se avecina sobre las paritarias, el secretario de trabajo sostuvo que "la discusión es entre los trabajadores y empleadores, nosotros pretendemos que las negociaciones lleguen a buen puerto y brindamos las herramientas necesarias para eso.  No se discute solo un número, sino condiciones de trabajo.”

Sin embargo, todos los gremios estarían reclamando aumentos muy por encima del porcentaje de inflación que estima el gobierno.

"La pauta para este año estará entre los 20 y 26 puntos de inflación", sostuvo Sabor, mientras que los gremios exigirán más del 40% en algunos casos.

Por otra parte el funcionario de gobierno en relación a los despidos masivos en el sector estatal consideró que debe haber una cantidad justa de trabajadores y agregó que "no importa la ideología de las personas, sino la utilidad".

No obstante, los gremios que denunciaron despidos en diferentes áreas ministeriales sostuvieron que no hay causas justificadas de despidos y en varios casos  agregaron que existe persecución política.

"Es muy feo decirle que no trabaja más a una persona, pero hay que hacerlo de frente", concluyó el funcionario en un contexto de crisis laboral tanto en el sector público como en el privado.