El intendente de Lanús se consolida en el armado del PRO en la provincia de Buenos Aires, en medio de la silenciosa disputa por el control político en las filas del macrismo. Ayer dio una nueva muestra de su expansión, al encabezar un encuentro con veinte intendentes bonaerenses “amarillos”.

“Nos reunimos para avanzar en el trabajo conjunto que vamos a realizar sobre cada distrito. Estamos convencidos de que juntos podemos hacer mucho más, por eso reafirmamos nuestro compromiso y continuaremos trabajando para beneficio de todos los vecinos”, resumió el jefe comunal de Lanús en sus redes sociales.

“Vamos a seguir por ese camino para lograr estar cada día un poco mejor”, enfatizó Grindetti, en esas frases con sabor a poco que ya caracterizan el manual discursivo del PRO.

Otro peso pesado del PRO bonaerense que estuvo presente en el convite fue el primo del presidente e intendente de Vicente López, Jorge Macri, que esta vez jugó de visitante en Lanús. A diferencia del peronismo y del radicalismo, el PRO tiene la virtud de no hacer públicas sus disputas internas. En sus mensajes a la prensa, todo es alegría. E incluso se repite el estilo visual de las fotografías de Presidencia, con fondo verde incluido.

“Estamos muy contentos porque hay equipo y muchas ganas de colaborar con el espectacular esfuerzo que está realizando para poner en marcha la Provincia”, resumió Jorge Macri sobre la reunión.

El jefe comunal de La Plata, Julio Garro, también se mostró orgulloso por ser “parte de este gran equipo”. “Estamos construyendo el cambio junto a Mauricio Macri y María Eugenia Vidal”, dijo el platense.

Macri y Grindetti representan el ala más experimentada del PRO bonaerense, frente a los “principiantes” de la política que tienen al joven Martín Yeza, jefe comunal de Pinamar; al periodista Diego Valenzuela, al frente de Tres de Febrero; o al cocinero Martiniano Molina, intendente de Quilmes, como sus máximos exponentes. Los tres "aprendices" estuvieron presentes en la cumbre macrista.

Asimismo, los que también llegaron a Lanús fueron: Sebastián Abella, de Campana; Nicolás Ducoté de Pilar; Ramiro Tagliaferro de Morón; Javier Martinez de Pergamino; Pablo Petrecca de Junín; Héctor Gay de Bahía Blanca y Ezequiel Galli de Olavarría.

Martín Yeza se hizo popularmente conocido, tras ganar los comicios en el municipio de Pinamar, por recorrer todos los canales de televisión para denunciar el vaciamiento del distrito que recibió "quebrado" de la gestión anterior.

Por ello avanzó con un duro plan de ajuste que incluyó, entre otras cuestiones, el recorte de viáticos y gastos de representación de su sueldo por significar un “gasto inmoral”.

Ahora, días más tarde, el joven intendente de Cambiemos parece haberse olvidado de la quiebra y decretó aumentos de entre el 98 y el 70 por ciento en los sueldos básicos de la planta política de la municipalidad.

Con la firma del decreto 250/16, Yeza instrumentó los aumentos a 14 de sus funcionarios más cercanos y le sumó un ingrediente más al conflicto gremial que mantiene con los sindicatos de guardavidas y de empleados municipales, que realizaron paros y movilizaciones frente a la sede municipal en plena temporada alta en reclamo de mejoras salariales y mejores condiciones de trabajo.

En diálogo con Página/12, Yeza justificó los aumentos: “No representan más de 5 mil pesos en mano. Un guardavidas estaba ganando más que el secretario de Seguridad”.

Además del incremento sobre el básico, el intendente sumó al sueldo de sus colaboradores dos bonificaciones de 16 mil pesos cada una en concepto de “bonificación por función” y “bonificación por disponibilidad horaria”.

Diarios locales difundieron el recibo de sueldo del secretario de Salud de la municipalidad, Jorge Luis Benítez, en el que constan ambos aumentos, que completan un sueldo de 42 mil pesos en mano.

Hace un mes, el propio intendente aseguró que los sueldos representaban “91 por ciento del presupuesto” y presentó su propia quita como un gesto de austeridad frente al estado crítico de las finanzas del municipio, que adjudicó a la gestión saliente.

En plena temporada, el clima político sigue subiendo la temperatura en Pinamar. Con una nueva movilización, la Asociación de Guardavidas de Pinamar AGP pidió por el diálogo con la comuna para no “verse forzada a llevar adelante una nueva medida de fuerza”.

Ya son cinco los paros que acumula el gremio en lo que va del verano y todavía no logra sentarse a discutir salarios con la flamante gestión del joven Martin Yeza.

En diálogo con Pinamar Diario, Fernando Spinach, Secretario Adjunto de AGP, señaló que se decidirá en asamblea los pasos a seguir. “La municipalidad no abrió las paritarias, ha decidido que los guardavidas tengan cero aumento”, indicó.

Además, Spinach reconoció que la comuna debía recomponer el salario de la planta política, pero también debe hacerlo con ellos. “Si es que no abre la paritaria, tendremos que ir a una medida de fuerza”, adelantó.

Según el Secretario Adjunto de AGP en el conflicto intervino el Ministerio de Trabajo, que paralelamente desestimó tres despidos de guardavidas ordenados por la municipalidad.

“La comuna ha retrocedido en esa determinación, ahora los tiene como suspendidos. Pero lo hace incumpliendo los derechos adquiridos de los trabajadores. Son dos temas en donde el municipio está cometiendo una ilegalidad”, puntualizó.

Por último, el dirigente explicó: “Incorporó a doce guardavidas para cubrir playas que tenía descubiertas, inspeccionó a los balnearios y produjo una gran cantidad de sanciones, al menos unos 20 balnearios fueron multados, hasta que repentinamente, la municipalidad tomó la decisión de negar paritarias y despedir a trabajadores. La última vez en que fueron los funcionarios a la audiencia en el Ministerio, dijeron que no sabían si iban a discutir paritarias. Es inaceptable”.

En paralelo y casi como una provocación, los funcionarios del jefe comunal de Cambiemos recibieron un 98 por ciento de aumento salarial.

La gobernadora electa bonaerense, María Eugenia Vidal, reunió esta mañana a los más de 60 intendentes electos de Cambiemos en la Provincia y les prometió que mantendrá un "vínculo de diálogo y respeto" durante su gestión.

Durante su discurso en el Anfiteatro de la sede del Ejecutivo de la Ciudad, con una impronta de maganement empresarial, Vidal les expresó su voluntad de mantener un "vínculo de diálogo y respeto" que "también hay que tener con los intendentes de los otros partidos políticos".

"Si a ustedes les va mal, a mí también, y viceversa. Necesitamos trabajar en equipo", enfatizó la gobernadora electa, y les remarcó la necesidad de enfatizar en el "hacer y estar" durante el transcurso de la gestión.

“Hay dos verbos que usé durante la campaña que van a ser los ejes de nuestra gestión: hacer y estar”, tuiteó la vicejefa de gobierno porteño, luego de la jornada de Capacitación de intendentes.

Luego de la palabra de la figura estelar de Cambiemos, habló el intendente reelecto de Vicente López y presidente del PRO bonaerense, Jorge Macri, que interpelando a los novatos se explayó sobre las dificultades que puede haber en el manejo cotidiano, como es el caso de los temas presupuestarios, y los exhortó a que "consulten y llamen todo lo que quieran".

De la jornada participaron desde los jefes comunales más antiguos, como Gustavo Posse (San Isidro) hasta los debutantes como Nicolás Ducote (Pilar). Allí estuvieron también las sorpresas de la elección de octubre; se trata de intendentes electos con poca experiencia de gestión, como el caso de Diego Valenzuela en Tres de Febrero; Martiniano Molina en Quilmes; Julio Garro en La Plata o Martín Yeza en Pinamar.

En tanto, de cara a la semana próxima, Vidal definirá si anula el cargo de jefe de Gabinete de la Provincia o lo deja en un rol "mínimo y técnico", aprovechando que el rol de coordinador de ministros en ese distrito no tiene rango constitucional.

Uno de los que se había mencionado para ser jefe de Gabinete era Jorge Macri, e incluso la misma Vidal había dicho que "era posible" que fuera a ese cargo, aunque desde el entorno de la actual vicejefa porteña dejaron trascender que no estaba en sus planes que ese nombramiento se haga efectivo.

Para la elección presidencial, en la quinta sección electoral se impuso el Frente Cambiemos con un 39% de los votos, seguido por el Frente para la Victoria de Daniel Scioli con un 32,27%. La Alianza Una, que se dirimió entre José Manuel De La Sota y Sergio Massa, alcanzó el 18,00%.

Con el 98% de las mesas escrutadas, en la sección que comprende la costa y el centro de la provincia, la fórmula de Mauricio Macri y Gabriela Michetti tuvo una altísima performance al conseguir más de 251 mil votos, lo que supuso el 82% de los votos de Cambiemos.

Este resultado también se vio reflejado en la muy buena elección de María Eugenia Vidal de cara a la gobernación bonaerense. La fórmula que Vidal encabezó junto a Daniel Salvador salió primera en la sección y obtuvo el 41,87% de los votos.

El Frente para la Victoria se quedó con el segundo lugar en la disputa por la gobernación con el 33% de los votos y, en esta sección, Aníbal Fernández superó a su rival en la interna, Julián Domínguez. En tanto, la fórmula Felipe Sola – Daniel Arroyo ocupó el tercer puesto con más del 15% de los votos escrutados.

En cuanto a los principales distritos de la sección, en Mar del Plata, el actual intendente vecinalista Gustavo Pulti, quedó segundo debajo del Frente Cambiemos, con un 28,24% de los votos. Aún con este resultado, el candidato de Acción Marplatense irá por su tercer mandato consecutivo como intendente de General Pueyrredón.

Por su parte, el candidato de Cambiemos que ganó la interna, Carlos Fernando Arroyo, lanzó un duro discurso contra el gobierno ejecutivo local. "Este es el día D. Vamos a desalojar a quienes han engañado a la opinión pública durante estos 8 años", dijo Arroyo durante su alocución de festejo.

Una de las sorpresas en la sección fue la elección del joven PRO Martín Yeza en Pinamar, quien ganó la interna de Cambiemos. La coalición del PRO y la UCR reunió el 39,50% de los votos contra el 22,09% del kirchnerismo, que llevó de candidato al intendente vecinalista Pedro Elizalde.

En Tandil el intendente radical Miguel Lunghi, quien jugó con el Frente Cambiemos, obtuvo un amplio triunfo en las PASO y sostuvo: “Yo tuve muchos más votos que Macri, no sé quién arrastró a quién, pero supongo que me habrá ayudado”.

El candidato del Frente para la Victoria y hermano del titular de ANSES, Pablo Bossio, quedó segundo en los comicios. “Nuestra estrategia será ir por los ciudadanos que no están de acuerdo con el gobierno municipal y nos ven a nosotros como una opción válida. Logramos un piso importante de votos”, señaló Bossio a los medios de la ciudad serrana.