Si más de 30 personas quieren cacerolear deberán pedirle antes permiso a Bullrich
Avance del Estado sobre las personas.
El Gobierno envió al Congreso el proyecto de la Ley Ómnibus con varias modificaciones, entre ellas, una que eleva de 3 a 30 el número de personas necesarias para que una “congregación intencional” en un espacio público se considere una manifestación. Es decir, si vecinos quieren cacerolear en una esquina por algún motivo – un robo, un corte de luz, lo que sea – y son más de 30 personas, deberán pedirle permiso a la policía. Insólito.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, había asegurado que se “retiraría” el artículo que imponía el tener que pedir permiso para las reuniones o manifestaciones de tres o más personas en la vía pública debido a que “generó confusión” y que hubo una “mala interpretación”. No lo hizo. Solo cambió la cantidad de personas. El gobierno de Javier Milei se jacta de la “libertad” pero si se aprueba la ley Ómnibus la gente deberá pedirle permiso al Estado para juntarse en una esquina o en una plaza.
El artículo en cuestión es el 305 que sostiene que “se entiende por ‘reunión’ o ‘manifestación’ a la congregación intencional y temporal de 30 o más personas en un espacio público con el propósito del
ejercicio de los derechos aludidos en la presente”.