Massa el policía bueno, De Narváez el malo
En medio de una fuerte decaída, el diputado y precandidato presidencial del Frente Renovador, Sergio Massa, acusó el golpe e intentó dar un nuevo giro a su imagen. Ahora se presenta como el candidato de “el cambio justo”. Una suerte de posicionamiento que se sitúa en “la ancha avenida del medio” que hay entre el Gobierno y la derecha del PRO, explicó el propio SM en el acto del sábado en San Martín.
“Quiero decirles que nosotros no somos ni la izquierda ni la derecha que hoy aparecen queriendo fracturar a la Argentina en dos. Nosotros no sentimos que la Argentina tenga que dividirse en facciones, tenemos que abrazar a todos aquellos que quieren vivir mejor. No queremos fracturar vinimos a la política a unir”, explicó Massa en un intento de desidiologizar la campaña y llenarla de 'buenas intenciones'.
Sin embargo, el que parece hacer oídos sordos al nuevo esquema discursivo del FR es el aspirante gobernador, Francisco De Narváez. Con sus declaraciones, el ‘Colo’ mantiene un perfil de neoliberal tan a ultranza, que por momentos hasta opaca al propio Mauricio Macri.
Apenas un día antes del discurso del tigrense, el ex Unión-PRO rechazó la idea de “distribuir desde el Estado”, pidió “racionalizar el gasto” y hasta se animó a anunciar la necesidad de un “ajuste que tiene que ver con justicia”, dijo en declaraciones a Infocampo.
Esta suerte de 'policía malo' que busca alarmar al electorado bonaerense parece ser la contracara del discurso lavado y de 'buena vibra' que postula el líder del FR.
Lo curioso es que el contrapunto entre ambos dirigentes del mismo espacio llega a límites que rozan lo ridículo cuando se compara lo que dijeron sobre cómo gobernarían al país.
El sábado Massa aseguró que “no queremos un Gobierno que digite todo con el látigo pero, tampoco por empresarios que pretenden tomar el poder por asalto”, se posicionó discursivamente SM.
La semana anterior, Francisco (que no es el Papa) había dicho que la única forma de que ingresen 5 mil millones de inversión es aceptar las condiciones que impone el empresariado internacional.
En una llamativa entrevista con el periodista Alejandro Fantino, De Narváez realizó un acting con el que intentó demostrar que la única forma que ingresen capitales externos es entregar las decisiones de Gobierno a lo que quieren las potencias extranjeras y sino “bye-bye”, resumió el Colo.
Entre la nueva versión más 'conciliadora' de Sergio Massa y la de extrema derecha de su principal precandidato a Gobernador, están las dos caras de un mismo espacio político. El juego con el que intentan seducir al electorado es el archiconocido del policía bueno y el policía malo. Habrá que ver qué resultado genera.