Wado, operador de los retornos y ¿posible vice de Scioli?
El Secretario General de la Presidencia, Eduardo “Wado” de Pedro, y actual armador electoral en la provincia de Buenos Aires, rankea alto como posible candidato a vicepresidente de Daniel Scioli.
Su perfil conjuga el kirchnerismo más puro -por su cercanía con la Presidenta y su hijo Máximo; su pertenencia a La Cámpora y su pasado como miembro de la agrupación HIJOS- con un buen vínculo con el sciolismo, sumados a una cintura política que genera algunos recelo.
De los ocho intendentes que ya abandonaron o están abandonando el Frente Renovador de Sergio Massa, seis golpearon la puerta del Frente para la Victoria, y quien le abrió la puerta a cuatro de ellos fue precisamente “Wado”.
Incluso a algunos que no son bien vistos por el kirchnerismo “duro”, como Raúl Othacehé, exponente típico de los llamados “Barones del Conurbano” a los que se enfrentó Martín Sabatella desde Nuevo Encuentro, aliado estratégico y electoral del kirchnerismo.
El último pase es el del intendente de origen radical, José Esverri, quien fuera parte del núcleo fundador del Frente Renovador. Ya la semana pasada había recibido a Florencio Randazzo en el acto de inauguración de la llegada a su municipio, Olavarría, del nuevo tren. Y ayer se despejaron las sospechas con la foto en que se lo ve junto a “Wado”. La instantánea es casi el equivalente al pasaporte para circular dentro del kirchnerismo.
A esos intendentes hay sumar los nombres del hombre de Giustozzi, Daniel Bolettieri (Almirante Brown), Humberto Zúccaro (Pilar) y Sandro Guzmán (Escobar). Gabriel Katopodis (San Martín) se hayan a medio paso de retornar al FpV, mientras que la aceptación de Luis Acuña (Hurlingham) resulta todavía dudosa.
Según advierten fuentes camporistas, un aval de Cristina Fernández de Kirchner a la eventual precandidatura de vice de Scioli de su actual Secretario, implicaría un vice equivalente para Randazzo, si se trata de mantener, como viene haciendo hasta ahora, la neutralidad entre los contendientes en las PASO. De los distintos nombres que circulan, el de Axel Kicillof es el que más seduce a los jóvenes militantes, que lo ven como un guardián “del proyecto”.