El gobierno nacional se ufanaba de que cualquier ciudadano podía comprar hasta 5 millones de dólares mensuales. Sin embargo, en los últimos días algo cambió: ahora las entidades no permiten adquisiciones que superan los 10 mil dólares mensuales. ¿Qué pasó?
Lo que ocurrió en el medio es que muchos inversores se están volcando hacia el dólar, lo que presiona sobre el precio de la divisa norteamericana. Además, esa suba repercute sobre la inflación. El resultado: el dólar está cerca de los 18 pesos y la inflación volvió a estar en el 2% mensual. Como si fuera poco, todo eso ocurre en medio de la campaña electoral.
Desde el Gobierno, dejaron trascender que las restricciones tienen que ver con la "inconsistencia fiscal" de los eventuales compradores rebotados. Sin embargo, esas limitaciones no existían antes y mucho menos eran tan comunes como en los últimos días.
De fondo, está la inconsistencia de la política del Banco Central que por ahora dio magros resultados. La inflación desde diciembre de 2015 hasta junio de 2017 se ubica en el casi 70%. Es récord en Latinoamérica después de Venezuela. Además, el endeudamiento vía Lebacs está en un nivel ya peligroso, debido a que representa buena parte de la base monetaria de la economía argentina. Mientras tanto, la actividad está a la baja desde que Mauricio Macri llegó a Casa Rosada.