Cambiemos suele tener una política comunicacional muy activa cuando le interesa sentar posición sobre un tema. Sin embargo, hoy prefirió el silencio mientras se espera una nueva multitudinaria marcha que reclamará por Santiago Maldonado, el joven desaparecido hace un mes en Chubut luego de una represión de Gendarmería. Seguramente, miles de personas se movilizarán en diferentes puntos del país.
Solo el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, habló en la previa de la marcha y pidió no hacer un "uso político" de la manifestación. El resto del Gabinete optó por el silencio.
Seguramente, el Gobierno será el principal blanco de las críticas de los familiares de Santiago Maldonado y de los organismos de Derechos Humanos. La razón: desde un principio, hace un mes, insisten en señalar la responsabilidad de la Gendarmería, la fuerza que reprimió a mapuches en Esquel. Santiago estuvo ese día en el corte de ruta que fue brutalmente reprimido. Esta semana, la Justicia comenzó a investigar bajo la carátula de "desaparición forzada de persona".
Para el Gobierno macrista, en cambio, no hay "indicios" de que se trate de una desaparición forzada. Además, desde el primer momento defendió a la Gendarmería, más allá de los testigos que la responsabilizan. Por último, mantuvo una postura de distancia con los familiares del joven y con los organismos de derechos humanos. Esas actitudes serán duramente reprochadas durante la marcha de esta tarde.