El sociólogo e investigador Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina, advirtió que a fin de año la pobreza podría alcanzar entre un 39 y 40 por ciento de la población.
Además, dijo que el dato del INDEC difundido ayer "es obvio y era esperado" y consideró que "se necesita mucho más que la emergencia alimentaria" para combatir el drama social que atraviesa la Argentina.
Vale aclarar que el índice se difundió oficialmente implica un alza de 8,1 puntos con respecto a la medición de ese mismo período de 2018. De acuerdo a la opinión de distintos especialistas, el impacto que tuvo la aceleración inflacionaria sobre los ingresos de los hogares empujó a más familias bajo la línea de pobreza. Los datos que fueron revelados señalan que el avance de la poobreza es la más alta desde la crisis de fines de 2001, que más tarde impactó en los indicadores sociales de 2002.
"La secuencia comienza en 2017 con una burbuja de consumo. Ese año los salarios le ganaron a la inflación, hubo crecimiento de empleo, más programas sociales en un momento electoral y la pobreza bajó al 25 por ciento. A partir de ahí se agotaron las condiciones macroeconómicas, cambió la situación internacional y hubo mala praxis acumulada. Crear burbujas nunca es gratis", aseguró Salvia.