Es uno de los corredores industriales más importantes del país junto con Gran Buenos Aires. Ambas zonas registraron un dramático aumento de la desocupación en comparación con el año pasado, la cifra más preocupante desde que asumió Milei.
La desocupación en el Gran Córdoba alcanzó un preocupante 9,2% durante el primer trimestre de 2025, ubicando a esta región como una de las más afectadas del país. Se trata de un aumento de 1,2 puntos porcentuales respecto al mismo período de 2024, y representa la cifra más alta desde que Javier Milei asumió la presidencia, según datos oficiales del INDEC.
El dato no es menor: el Gran Córdoba, junto al Gran Buenos Aires —que registró una tasa similar del 9,1%—, conforma uno de los principales corredores industriales del país. La suba del desempleo en estas zonas industriales emblemáticas no solo enciende alarmas, sino que refleja con crudeza los efectos sociales del rumbo económico actual.
A nivel nacional, el desempleo alcanzó el 7,9%, con una pérdida estimada de 350.000 puestos de trabajo solo en los primeros tres meses del año. En Córdoba, el impacto se tradujo en 11.000 empleos menos, marcando un deterioro directo del mercado laboral.
Precarización en aumento
Más allá del crecimiento de la desocupación, otro fenómeno inquietante es el avance de la precarización: el empleo por cuenta propia creció en casi 250.000 personas respecto al año pasado, mientras que también aumentaron los asalariados no registrados. De esta manera, aunque la tasa general de desempleo se mantenga dentro de ciertos márgenes, la calidad del trabajo se ha deteriorado drásticamente.
“Lo relevante no es solo la suba del desempleo, sino el cambio en la composición del empleo. Hoy hay más cuentapropismo y empleo informal. Eso implica más precariedad”, explicó Luis Campos, del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma.
El último informe del INDEC sobre el mercado de trabajo deja al descubierto un panorama de creciente incertidumbre laboral y debilidad estructural. Las cifras revelan que, lejos de consolidarse una recuperación, se profundiza la crisis de empleo en regiones clave del país. El modelo económico libertario muestra así sus consecuencias más palpables: pérdida de empleo de calidad, crecimiento del trabajo informal y un horizonte incierto para miles de familias.