Sucedió cuando los familiares de las víctimas de casos de mala praxis realizaban un escrache frente al edificio municipal de Malvinas Argentinas, para denunciar el sistema de salud municipal.

El presidente del Concejo Deliberante de Malvinas Argentinas, el massista Alberto Cobreros, lejos de asumir su responsabilidad como representante del pueblo, se escondió en un asensor para intentar huir, sin ser visto, por un grupo de familiares de víctimas de mala praxis que manifestaban y le pedían audiencia.

Los familiares vienen llevando desde hace más de tres años su reclamo para esclarecer los casos y que se haga justicia. Entre los responsables a los que señalan figura el Secretario de Salud, Hugo Schwab y el propio intendente del distrito, Jesús Cariglino, por lo que consideran casos de "adulteración de historias clínicas y mala praxis en el distrito".

Es por ello que en esta oportunidad marcharon frente a los hospitales concentrados en la Ruta 197, la semana pasada. La protesta se trasladó luego al Palacio Comunal y terminó en el Concejo donde se registró el incidente entre ellos y el hombre "fuerte" del Intendente Jesús Cariglino, en el Concejo Deliberante.

Al llegar, solicitaron ser recibidos por el presidente del cuerpo, Alberto Cobreros. Al parecer, Cobreros solo respondió, a través de su secretaria, con evasivas.

Tres horas después, con los familiares esperando en los pasillos, el funcionario municipal que debería responder políticamente como representante del pueblo optó por eludir esa responsabilidad, y buscó fugarse desde su oficina hasta el ascensor que lo lleva directo a su cochera en el subsuelo. El tramo lo hizo acompañado por personal de seguridad.

Los familiares advirtieron el desplazamiento y lo alcanzaron cuando ya casi se cerraba la puerta del ascensor. Claudia Ledesma, que reclama por su hija Melani, y Eva Frías, denunciante por la muerte de su hermano Facundo, quedaron a centímetros de Cobreros, al que interpelaron por su negativa a atenderlos y su falta de interés en el tema.

Cobreros se atrincheró en el interior del ascensor, mientras que las mujeres, tras impedir el cierre de la puerta, le exigieron que atienda al grupo. Fueron momentos tensos, en los que no faltaron los insultos para el intendente Cariglino.

La situación se distendió cuando finalmente el hombre de Cariglino accedió a fijar un encuentro con representantes de la comisión de familiares, en su despacho.