A medida de que se acercan las PASO la campaña bonaerense se va poniendo cada vez más bizarra. Es que los candidatos comienzan a recurrir a cualquier artilugio con tal de llamar la atención de los votantes y los medios de comunicación.
En esta oportunidad fue el esposo de María Eugenia Vidal, Ramiro Tagliaferro, quien es precandidato a Intendente de Morón, el que comenzó una particular campaña.
Sucede que el hombre de Cambiemos aprovechó la semana de la dulzura para dar impulso a su instalación de imagen y para ello reparte golosinas en consonancia con la fecha comercial.
Las golosinas están envueltas en celofán de fondo amarillo, con los trazos de colores que siempre acompañan al PRO. En ellas se puede leer la inscripción "Te quiero Morón" y su firma.
"Hoy arranca una nueva semana de la dulzura, una semana en la que podemos animarnos a conquistar lo que tanto queremos, en la que podemos dar el primer paso y hablar con la gente de otra forma, en otro tono" reseñó
Y subiendo la temperatura de sus declaraciones Tagliaferro afirmó que "ser sinceros y amables no es sinónimo de debilidad, cómo si lo es quienes se expresan con agresividad. Seamos amables, compartí un "Te Quiero Morón".
Al menos por el momento el marido de Vidal no pide "una golosina por un beso", se conforma con conquistar los corazones y los votos de los habitantes de Morón.