El candidato a presidente Sergio Massa prefirió romper públicamente con un tabú, y habilitó una práctica habitual: que los intendentes manden a cortar las boletas y repartan las suyas con las de los candidatos a gobernador o presidente de otros partidos, para defender su territorio
Después de haber sacado un 14% (que podría llegar a 20% si el tigrense consigue quedarse con los votos de Juan Manuel de la Sota), el líder del Frente Renovador no tenía demasiado margen y optó por blanquear la posibilidad del corte. Es que Daniel Scioli y Mauricio Macri pintan como opciones más ganadoras y con mejores chances de traccionar hacia arriba los votos de los intendentes.
Sergio Massa señaló ante el diario La Nación que los intendentes del Frente Renovador tendrán vía libre en los comicios generales de octubre para distribuir y asociar sus boletas municipales a las de Daniel Scioli, del Frente para la Victoria, y las de Mauricio Macri, de Cambiemos, para poder conseguir la reelección en sus distritos.
"Ellos me dieron un piso en las PASO y lo valoro. Ahora, tanto ellos como yo tenemos que crecer y buscar nuestro techo", dijo el candidato presidencial de UNA.
"Tengo que respetar los intereses de mis aliados, que se pusieron la campaña al hombro. Yo no les puedo poner un techo", explicó.
"Lo otro no sólo es egoísta. Es necio: negarlo es no entender la política", cerró Massa.
El guiño de Massa tiene como destinatario, por ejemplo, al intendente Jesús Cariglino, de Malvinas Argentinas, que en las PASO del domingo pasado perdió por centésimas con el candidato del FpV, Leo Nardini: 40,16% a 39,34%, según los últimos datos disponibles. Scioli, por su parte, consiguió el 41,4%, contra el 34,2% de Massa y el 15% de Cambiemos.
En San Miguel, el massista Joaquín de la Torre obtuvo el 31% de los votos y quedó detrás de la suma de los cuatro candidatos kirchneristas, que redondearon un 41%. Mientras Luis Acuña, en Hurlingham, consiguió el 25% en las PASO, superando por poco a Cambiemos y lejos del candidato kirchnerista, Juan Zabaleta (39,8%).
Del blanqueo de Massa se deduce una realidad: si bien el jefe del FR buscó instalarse como el ganador inesperado con su 14% presidencial, lo cierto es que en sólo dos municipios del conurbano los candidatos del Frente Renovador fueron los más votados: San Fernando y Tigre.
La pregunta es quién será el más beneficiado con ese corte de boletas autorizado por Massa: ¿Scioli o Macri? Por haber quedado primero en las PASO y por su perfil peronista, todo apunta a que el actual gobernador podría capitalizar mejor ese juego a tres puntas de los intendentes.