Fuerte repudio a la designación de un militar que torturó a conscriptos en Malvinas
El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos nombró a Dorigon, al frente de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC, ex RENAR) en la ciudad de Rosario. Dorigon formó parte como subteniente del regimiento de Infantería 12 y fue denunciado en el 2007 ante la Justicia federal en Río Grande por un grupo de veteranos de Malvinas que lo acusaron de torturas contra soldados en las Islas.
Dorigón está imputado bajo la acusación de haber enviado a torturar a un soldado combatiente de Malvinas, donde fue destinado en 1982, con el grado de subteniente. En 2007 un grupo de excombatientes conscriptos presentó en el juzgado federal de Río Grande, Tierra del Fuego, una denuncia contra sus superiores por haber sido víctimas de violaciones a los derechos humanos en las Islas. El expediente, con testimonios de más de 100 excombatientes, llegó a la Cámara de Casación Penal, que rechazó el planteo y declaró los crímenes de Malvinas prescriptos. En marzo de 2012, el Centro de ex Combatientes de Malvinas de La Plata, presentó un recurso ante la Corte Suprema de Justicia que desde entonces espera una resolución.
Ernesto Alonso, del Centro de Combatientes de las Islas Malvinas (CECIM) de La Plata, dio detalles de las acusaciones contra el funcionario designado por el macrismo en la Agencia Nacional de Materiales Controlados.
"El año pasado se desclasificaron los archivos secretos de Malvinas. Muchos compañeros que con valentía denunciaron” señaló el dirigente de los ex combatientes que invitó a “cualquier fiscal de la Nación a ver esos archivos y a seguir denunciando estos casos".
Ernesto Alonso dijo que “estas cosas se saldan con un proceso de memoria, verdad y justicia" y para eso pidió que “que se realicen políticas de estado".
Después de dejar el Ejército, Dorigón incursionó rápidamente en las áreas de Recursos Humanos de empresas privadas, como otros ex represores. Fue gerente en supermercados Coto y tuvo a cargo 750 personas en la empresa Centinela de Seguridad Privada, donde inicialmente se abocó a “la reorganización del área de Operaciones”, para recalar finalmente en la gerencia de Recursos Humanos de Liliana.
En febrero y marzo del año 2014, la empresa de electrodomésticos despidió a una docena de trabajadores, quienes lanzaron una serie de medidas de fuerza en respuesta al ataque de la patronal, claramente antisindical. Realizaron asambleas en la entrada de la fábrica que, de hecho, paralizaron la producción de la empresa por más de tres semanas. Los trabajadores denunciaron que fueron echados por cumplir la función de “delegados de hecho” durante casi un año, ya que en sus 65 años de historia, la empresa Liliana impidió la organización sindical y los sometió a máximas condiciones de precariedad.
Los trabajadores, en ese entonces, denunciaron que “la gerencia de Recursos Humanos de Liliana encabezada por un ex militar de la dictadura, junto con personal de seguridad y psicólogos montaron un operativo sobre la ruta para parar a todos los trabajadores y obligarlos a conducirse hacia otra planta donde no realizan sus tareas”. El objetivo era impedir una asamblea donde los trabajadores iban a discutir los pasos a seguir para la reincorporación de los despedidos. A la cabeza de estas medidas estaba Marcelo Dorigón.
Hoy, con este prontuario en el portafolio, Dorigón es funcionario del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de La Nación, y desempeña sus funciones más precisamente en el Anmac (ex Renar).