El Gobierno paga un millón por mes a OCA para almacenar los kits del Plan Qunita
El revanchismo y la eliminación de todo lo que huela a kirchnerismo por parte de Cambiemos llega a sobrepasar lo absurdo y entra en el terreno de lo psicótico. En esta ocasión se debe a que el plan destinado a mujeres embarazadas y bebes recién nacidos en situación de vulnerabilidad social que no llega a las personas que lo necesitan porque se encuentra alojada en uno de los almacenes de esa empresa de correos a precios millonarios.
Hace algunos meses el que comenzó la cruzada anti-Plan Qunita por parte del gobierno. La primera de ellas la realizó el Juez Claudio Bonadío cuando en septiembre del año pasado ordenó al Ministerio de Salud incinerar más de 60 mil moisés y sacos de dormir de dicho plan.
Tras las fuertes condenas realizadas distintos profesionales de la salud y beneficiarios del programa, Bonadio tuvo que recalcular y no calcinó los 60 mil kits del Plan Qunita.
La segunda cruzada Anti-Qunita, llevada a cabo por el Gobierno es más invisible y más costosa, ya que el ejecutivo paga un millón de pesos mensaules para que los kits del programa se alojen en los almacenes de la empresa OCA. Así, el gasto del almacenamiento asciende a 12 millones de pesos anuales mientras los cunas, baberos y todo lo que hace falta a un recién nacido acumulan polvo y no llegan a potenciales beneficiarios.
El dato de la cruzada, lo confirmó el ex ministro de Salud, Daniel Gollán, a Diario Pulse y publicado en el sitio En Orsai. En ambas publicaciones se reproduce: “El ministro Lemus está pagando por mes un millón de pesos de almacenamiento. Estamos pagando todos los argentinos para guardar las cunas que necesita la gente”.
Gollán, además recordó que “todas las sociedades científicas que habían sido citadas junto al INTI, como otras organizaciones que decían que eran peligrosas, han salido a desmentir y a pedir públicamente por carta que se repartan (los kits del Qunita). El juez dio la orden que se repartan pero el ministro Lemus está pagando un millón de pesos por mes de almacenamiento.
“El juez dio la autorización e indicación al ministro Lemus para que las entregue. Dijo que queda a consideración de él. Es un Poncio Pilato. Él había negado dos veces esto y había pedido que se quemen. Ante la presión, se lavó las manos y que se haga cargo el ministro. A Lemus le dieron la orden política de no repartir para no quedar como mentirosos”.
Gollán detalló que “incluso, en la resolución que firmó el ministro para quitar definitivamente el plan Qunita, su fundamento era la peligrosidad de las cunas. Desaparecido el fundamento de peligrosidad de las cunas, habría que dar estos 60 mil kits incautados y volver a poner en marcha el plan que salvaba vidas”.
“Con el programa Qunita logramos en un año bajar 700 muertes de niños. Bajó 0,9 la mortalidad infantil. Fue el mayor descenso interanual de todos los años. Esto al periodismo hegemónico no le interesa”, subrayó.
Gollán enumeró las políticas y programas desmantelados en apenas un año de gobierno de Macri. “A nivel nacional estamos viendo el achique en todos los programas con subejecuciones presupuestarias. El programa Remediar bajó un 40% y este año bajó un 40% más, hasta su extinción. Es un programa que daba medicación gratuita para 4,5 millones de personas en el país de bajos recursos”.
Días atrás, la Comisión Directiva de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) denunció en una carta dirigida a Lemus la falta de drogas de primera línea contra la tuberculosis y advirtió por las consecuencias en salud ante la irrupción de dichos tratamientos.
La gobernadora María Eugenia Vidal dio de baja el programa que otorgaba hormonas a unos 2000 chicos con problemas de crecimiento. La medida se sumó a las denuncias por la interrupción de entregas en todo el país de remedios para pacientes con VIH, situación advertida a lo largo del año por diversas organizaciones.
“El Gobierno también redujo el programa Médicos Comunitarios y el programa de Enfermedades Transmitidas por Vectores, retiraron los más de 600 agentes nacionales que había trabajando en la prevención. Y compraron apenas el 20% de los preservativos”, continuó. “En el lapso de los próximos dos años todos los programas nacionales quedarán reducidos a su mínima expresión”.
El kit lanzado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner en 2015 y dado de baja por la administración de Cambiemos contiene una cuna de madera con colchón y acolchado, juego de sábanas y toallas, enteritos de manga larga y corta, bolsa y cambiador, chupete, mordillo, extractor de leche materna y un termómetro digital, un tarjetón de identidad y un diario para que la mamá registre el historial de su hijo, entre otros.