Según Infobae, también cayó la imagen del Gobierno de Macri en el exterior
El portal con tendencia oficialista también castiga al Gobierno. En una nota decidió advertir sobre el rumbo económico de la Argentina, las fallas en sus predicciones y sus consecuencias.
De fondo, los reproches van dirigidos al gradualismo y su incapacidad para revertir la inflación, el déficit, la deuda y lo que grandes grupos económicos y financieros estiman conveniente sobre la región.
La apuesta se concentra, una vez más, en el segundo semestre. Confían en que el futuro cambie según una serie de proyecciones que hasta el momento no generan confianza incluso en una buena parte de sus votantes, como puede verse en los porcentajes de las encuestas. Luego de dos años, las presiones y la caída en la imagen de Macri golpean más fuerte.
"Algo cambió desde fin del año pasado: el entusiasmo posterior a la victoria legislativa del Gobierno quedó atrás y ahora cambió la mirada de las grandes entidades de Wall Street. Argentina ya no es más la "niña bonita" de los mercados y decayó el entusiasmo ante la lentitud para avanzar con las reformas estructurales.
La reforma laboral quedó en la nada, la previsional fue sólo una excusa para modificar la fórmula de ajuste de las jubilaciones y la baja de la presión impositiva incluída en la reforma tributaria casi no se sentirá en los próximos dos años.
Para colmo la ley de mercado de capitales (ahora de financiamiento productivo), que es clave para atraer inversiones e impulsar nuevos instrumentos como los fondos comunes cerrados finalmente, no salió a fin de año y aún es una incógnita si el Congreso la aprobará en marzo.
Sebastián Maril, economista de la consultora Research for Traders lo planteó con crudeza en un comentario por redes sociales el viernes, tras visitar clientes en Nueva York: *Finalmente Wall Street empieza a desenamorarse de Argentina, pero no ve alternativas de inversión en el mundo emergente que ofrezca rendimientos similares. Muchos ven cambios cosméticos desde CFK y coinciden en que Argentina precisa reformas estructurales*
Otro agudo analista de mercado, Leonardo Chialva, también expresó por qué hay que manejarse de manera cautelosa en este momento. "Las chances de que el mercado argentino sea recategorizado en junio como emergentes son más altas que el año pasado. Pero aún hay un 30% de posibilidades de que esto no suceda y en ese caso el golpe puede ser muy fuerte".
El aumento de la tasa a diez años en Estados Unidos le pegó a la Argentina como a ningún otro mercado. La excusa que esgrimen en el equipo económico –utilizando una expresión típica del universo financiero- es que somos un país de *alto beta*. Es decir que los activos argentinos son más volátiles: suben más en épocas de bonanza, pero sienten más la caída cuando los mercados se ponen más temerosos.
Pero los títulos argentinos resultaron mucho más afectados que ese incremento de la tasa americana, que pasó de 2,40 a 2,87% anual el último viernes. En cambio, el rendimiento de los bonos argentinos subió un punto, pasando en promedio de 6% a 7% para el plazo de diez años. Hoy el consejo más común entre los analistas es salir de posiciones en bonos largos argentinos, aún cuando rinden hasta 7,5% y concentrarse en los plazos más cortos posibles.
El deterioro de la deuda argentina implica más costo de financiamiento. Hoy para el Gobierno resulta más caro financiarse en el exterior y por eso seguirá haciéndolo localmente. Esta semana colocará dos bonos en pesos ajustables por CER para seguir cubriendo las necesidades financieras del 2018.
Habiendo transcurrido dos meses del año, el riesgo país argentino subió mucho más que el brasileño y la tendencia se fue acelerando en las últimas semanas. A pesar de la crisis política y de tener por delante un incierto proceso electoral, hoy las preferencias de los brokers internacionales está mucho más enfocada en Brasil y su proceso de recuperación económica luego de varios años de estancamiento.
De una distancia de sólo 110 puntos, hoy el riesgo argentino está a 168 puntos básicos de Brasil, y volvió a superar los 400 puntos.
No ayudaron los "grandes números" conocidos esta semana:
-Las cifras fiscales se ven comprometidas por el aumento de los intereses de la deuda.
-La dolarización de carteras se aceleró en enero por la volatilidad cambiaria.
-El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, declaró que tiene "pocas herramientas" para luchar contra la inflación. Además, la inflación del mes tiene un piso de 2,5% y la "núcleo" estaría en el orden de 1,9%, según el relevamiento efectuado por la consultora Elypsis.
–El déficit comercial estuvo al borde de los USD 1.000 millones.
Sin embargo, en el Gobierno creen que la "mala onda" de los mercados con la Argentina será un fenómeno transitorio. Y confían en que las buenas noticias económicas terminarán convenciendo a los que ahora se muestran escépticos.
*La inflación es muy alta ahora porque se juntaron todos los aumentos de tarifas. Pero después de mayo ya no hay más ajustes, salvo el de transporte en junio. No vemos motivos por lo que los índices no bajen muy fuerte a partir de junio", señalan en Hacienda. Y redoblan la apuesta: Confiamos en que haya meses con inflación cercana a 1% o incluso menos*."