En el último tiempo parece profundizarse una grieta en el Frente Renovador, el espacio que conduce (¿conduce?) el ex candidato a presidente de la Nación Sergio Massa. Los diferentes armados de sectores del peronismo ubicaron a dirigentes renovadores en diferentes lugares. La intervención del PJ volvió a dividir las aguas.
Hace una semana, un sector del justicialismo se reunió en Gualeguaychú, Entre Río, en torno a la figura del senador Miguel Pichetto, y con fuertes críticas al kirchnerismo. "El límite es CFK", insistieron Pichetto y el inclasificable Diego Bossio. A ese encuentro asistieron los massistas Graciela Camaño y Marco Lavagna. De hecho, se esperaba la presencia de Massa, que permitió seguir con su perfil bajo habitual.
Mientras, otros massistas como Felipe Solá y Daniel Arroyo continúan participando de los espacios de negociación entre el kirchnerismo y sectores del peronismo bonaerense. "El límite es Macri", suele insistir Solá. "Sigo pensando de la misma manera que hace dos semanas", respondió cuando le preguntaron sobre el encuentro de Gualeguaychú. El ex gobernador de Buenos Aires insiste con armar una gran frente que no excluya a nadie.
La insólita intervención del PJ, que puso a Luis Barrionuevo al frente del histórico partido, volvió a encender la grieta en el massismo. Se sabe de la relación de Barrionuevo con Camaño, quienes son pareja hace muchos años. Por su parte, Solá salió a cuestionar lo realizado por Servini de Cubría. "Duhalde-62 Org- Servini de Cubría- Barrionuevo-Acuña………Macri!!", chicaneó Solá.
Duhalde-62 Org- Servini de Cubría- Barrionuevo-Acuña………Macri!! pic.twitter.com/Q7VsXPtX0a
— Felipe Solá (@felipe_sola) 10 de abril de 2018
"Massa deja hacer, después se verá más adelante", aseguraron cerca del ex diputado a Primereando Las Noticias. Sea por estrategia o porque no le queda otra (¿Massa puede conducir hoy a Felipe Solá?)