Como sucede en muchos hogares de la Argentina donde hay dos perspectivas en juego de cara al balotaje del próximo 22 de noviembre, los Duhalde también experimentan esta división. Quienes conformaran un binomio con gran influencia en la política nacional, ahora devenidos en comentaristas de la política, salieron a mostrar públicamente sus diferencias maritales.
Por un lado, el ex presidente de la Nación, Eduardo Duhalde, pidió "un voto de confianza" al candidato presidencial oficialista, Daniel Scioli, al destacar que es "totalmente distinto" a la presidenta Cristina Fernández.
"Daniel Scioli no es (la presidenta) Cristina Kirchner, que no se equivoquen los compañeros. Está llegando la fecha y creo que tienen que saber los justicialistas, sobre todo los que votaron a Massa, que Daniel no es Cristina. Es totalmente distinto, y que hay que darle un voto de confianza", aseguró Duhalde en declaraciones a radio El Mundo.
Ante la consulta sobre si va a votar a Scioli, respondió: "Si, básicamente porque es la contra figura. Es el hombre que en la Provincia se lleva bien con todo el mundo, gobernando con minorías parlamentarias. Tiene respeto hacia todo el mundo. Es lo que necesitamos".
Como informó PRIMEREANDO, distinta es la postura de su esposa, la ex senadora Hilda "Chiche" Duhalde, quien había manifestado que votaría a Mauricio Macri porque "el kirchnerismo no ha hecho las cosas bien".
"A (Daniel) Scioli no lo quiero más para la Argentina, voy a votar a Macri", dijo la esposa del ex presidente, al sostener que el candidato oficialista "no mostró la autonomía necesaria para poder gobernar".
Consultado sobre la posición de su esposa, el ex presidente e histórico mandamás de la Provincia opinó que "cada uno tiene su opinión y respeto a mi mujer vote a quien vote, como también a todos los que votan a Macri".
Además, dijo estar "convencido" de que Argentina necesita "una persona que pacifique y tranquilice después de estos 12 años" de kirchnerismo.
Por último, afirmó que Macri "no fue presidente en la primera vuelta por la soberbia propia de los dirigentes", ya que "si no hubiese puesto como límite a (el referente del Frente Renovador, Sergio) Massa, muy posiblemente sería presidente".