Para evitar una rebelión boina blanca, Macri se lleva a los legisladores de la UCR a Lujan
Tras varias críticas de referentes partidarios, los legisladores del radicalismo se reunirán en Luján el próximo 24 de febrero para debatir su estrategia como partido de cara a un año que amanece ya como muy convulsionado.
Para calmar las aguas y evitar que la sangre llegue al río, Mauricio Macri mandará al cónclave boina blanca al ministro del Interior, Rogelio Frigerio; el jefe de Gabinete, Marcos Peña y el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, el radical Ricardo Buryaile.
La idea es integrar a los radicales y hacerlos parte del Gobierno, en momentos en los que está pronto a comenzar el año legislativo y ahí son esenciales.
Es que Cambiemos en ambas cámaras necesita del aporte radical para poder quedar en una situación expectante con sus iniciativas.
Fuentes partidarias señalaron a Telam que además de la discusión interna se analizarán temas como la distribución del ingreso y las medidas que se deben tomar para que no se afecten los ingresos de los asalariados y la reforma política.
En este marco, indicaron que la UCR y el PRO buscarán con sus referentes afianzar su perfil como partido de gobierno en un "clima de colaboración" con el Poder Ejecutivo..
Por otra parte, informaron que el 11 de marzo los intendentes radicales de todo el país se reunirán en Córdoba y al encuentro está invitado el presidente, Mauricio Macri.