Un escándalo con millones de un gremio salpica a Gladys Gonzalez
Los escándalos parecen perseguir a Gladys Gonzalez. Es que tras su convulsionada candidatura a intendente de Avellaneda, y el repudio de sus compañeros del frente Cambiemos por no ser residente del distrito, le llegó la orden de normalizar el sospechado gremio de marineros SOMU.
La entidad sindical, que comandaba Omar "Caballo" Suarez y que esta investigada por manejos fraudulentos, fue intervenida por la justicia penal (algo inédito en la historia del sindicalismo argentino). Entre los normalizadores se nombró a la Diputada nacional Gonzalez como pata política de la avanzada.
El triunvirato de interventores llegó con la orden de poner en claro las cuentas del sindicato, buscar las pruebas para comprobar los ilícitos de Suarez y esclarecer los procedimientos para transparentar la organización gremial. Sin embargo parece que las nuevas autoridades se tomaron algunas atribuciones de más.
Según el material que publicó el portal especializado InfoGremiales, los gestores, nombrados por el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, resolvieron despedir personal que hacía años cumplía funciones en el gremio, encarar transformaciones edilicias y hasta designar toda una planta de empleados nueva con suculentos salarios.
De hecho, las designaciones que los interventores hicieron, y declararon en el expediente judicial, suman la friolera de casi 1,3 millones de pesos mensuales. Un dineral que sale de los aportes de los afiliados.
Gonzalez, referente político de la intervención, llegó allí por el mandato del propio Mauricio Macri. El Presidente busca las pruebas necesarias para encarcelar a Suarez y enviar un mensaje de mano dura al gremialismo. Por ello mandó a una persona de su extrema confianza a cumplir con una tarea que todavía está en veremos.
Mientras tanto, la blonda diputada se pasea por las seccionales del SOMU hablando con los marineros a los que les promete normalizar la organización gremial. Por el momento estira los plazos, dispone de la abundante caja que encontró en el gremio y busca algo más que autos prestados a un diputado del Frente para la Victoria para justificar su estadía.