La Vicepresidenta compartió un video en las redes y escribió un mensaje en el que cuestionó a los organismos de Derechos Humanos. “Los responsables de estos crímenes no pueden quedar impunes”, expresó.
La vicepresidenta Victoria Villarruel compartió un mensaje en sus redes sociales en el Día de la Memoria, en el que reivindicó a “las víctimas del terrorismo” ocasionadas por agrupaciones políticas, al mismo tiempo que cuestionó la cifra de 30.000 desaparecidos por la última dictadura cívico-militar.
“Los DDHH son para Todos. La Memoria también. Verdad, Justicia y Reparación para las víctimas del terrorismo. Los responsables de estos crímenes no pueden quedar impunes. #NoFueron30000″, escribió este domingo.
En el video, sin la presencia de la Vicepresidente, Victoria Villarruel, se ve a un hombre contando su testimonio cuando perdió a su hijo en aquella oportunidad a manos de un atentado.
En su testimonio, Isaac Barrios revela como sucedió la tragedia donde su hijo falleció: “El 6 de diciembre de 1977 Juan es asesinado en un atentado terrorista de Montoneros”, agregando las tristes palabras del hombre sobre aquel trágico suceso.
Los DDHH son para Todos. La Memoria también. Verdad, Justicia y Reparación para las víctimas del terrorismo. Los responsables de estos crímenes no pueden quedar impunes. #NoFueron30000pic.twitter.com/RMYiwB6AXl
Mientras el gobierno de Javier Milei monta una fuerte ofensiva diplomática y mediática contra Venezuela mira para otro lado en torno a la grave situación en el Atlántico Sur generada por Gran Bretaña.
Por Ignacio Corradi
El gobierno de La Libertad Avanza (LLA) monta por estos días una fuerte ofensiva diplomática contra Venezuela luego de que presionado por EEUU decidiera el embargo y posterior entrega para su destrucción del avión de la empresa Emtrasur, a lo que Caracas respondió cerrando su espacio aéreo al transito de aviones argentinos.
Las fricciones con Venezuela si bien no son nuevas ingresaron en los últimos tiempos en una fase de mayor confrontación verbal, el principal motivo fue la retención por parte del gobierno argentino del avión Boeing 747-300 matrícula YV3531 de la empresa Emtrasur en junio de 2022 luego de aterrizar en el aeropuerto de Ezeiza (previa negativa a hacerlo en Montevideo, decisión que Uruguay tomo basado en información de “agencias extranjeras”), una vez en Ezeiza la empresa Shell se negó a cumplir el contrato para abastecer de combustible a la aeronave. Si bien en su momento la retención del avión y su tripulación se trato de una decisión judicial, la misma estuvo fuertemente influenciada por las presiones ejercidas por Estados Unidos quien afirma que la empresa Emtrasur esta asociada al gobierno de Irán e implicada en actividades terroristas. Esta teoría fue rápidamente abonada por referentes del macrismo quienes al conocerse la situación comenzaron a viralizar una serie de teorías conspirativas y conjeturas infundadas en torno a la aeronave y su supuesto contenido, llegando a sostener que era parte de una operación terrorista. Lo cierto resultó ser (como se supo después) que el avión transportaba un cargamento de repuestos para la empresa Volkswagen sin poder comprobarse vinculo alguno con actividades terroristas.
El gobierno de Javier Milei dispuso finalmente la entrega inmediata del avión a los Estados Unidos quien procedió a su destrucción, acción fuertemente repudiada por el gobierno de Venezuela quien acusó a Milei de “robarse el avión”, El canciller venezolano, Yván Gil, dijo que el gobierno de Milei había cometido “actos de piratería y robo” contra su país y comunicó en la red social X la decisión que había tomado el Gobierno: “Venezuela ejerce plena soberanía en su espacio aéreo y reitera que ninguna aeronave que provenga o se dirija a la Argentina podrá sobrevolar nuestro territorio hasta que nuestra empresa sea debidamente compensada por los daños causados, después de las acciones ilegales realizadas, solo con el fin de complacer a sus tutores del norte”. La medida del gobierno bolivariano de cerrar su espacio aéreo al transito de aeronaves argentinas motivó al gobierno argentino a realizar una furiosa campaña diplomática contra el gobierno de Nicolas Maduro haciendo una denuncia en la Organización de Aviación Internacional (OACI), la cual forma parte de la ONU.
Se cometió un crimen contra un Avión de Conviasa Emtrasur que nos secuestraron, le quitaron los colores de la bandera, le borraron el nombre de Luisa Cáceres de Arismendi y luego lo picaron en pedazos. Ese es el odio que le tienen a la Venezuela revolucionaria y bolivariana…… pic.twitter.com/jBEJyF2ATf
El gobierno neonazi de Argentina, no solo es sumiso y obediente con su amo imperial, sino que tiene un vocero “cara de tabla”: El Sr. Manuel Adorni pretende desconocer las consecuencias de sus actos de piratería y robo contra Venezuela, las cuales fueron advertidas en reiteradas… https://t.co/VB5GoR4mgl
Mientras Milei busca complacer los intereses regionales de EEUU y canaliza los esfuerzos diplomáticos contra Venezuela país contra el que EEUU prorrogó por un año mas el paquete de sanciones económicas, en el Atlántico Sur el gobierno argentino hace caso omiso a la grave situación planteada por el Reino Unido de Gran Bretaña quien amplió de manera arbitraria la posesión de inmensos espacios marítimos en el Atlántico Sudoccidental bajo el pretexto ambiental de conformar unÁrea Marina Protegida (AMP) estableciendo de esta manea restricciones totales a la navegación y pesca sobrecasi 170.000km2 adicionales del Mar Austral.
En paralelo a esta medida, el gobierno británico llevó adelante en estos días una nueva demostración de fuerza que incluyo ejercicios militares en las Islas Malvinas con el despliegue tropas y aeronaves de combate. Estas acciones del gobierno de ocupación británico se enmarcan en una agresiva política de fortalecimiento y expansión de su presencia en el Atlántico Sur, la que incluye la construcción de una renovada infraestructura portuaria y logística que busca rivalizar con el proyecto del polo logístico antártico que Argentina decidió llevar adelante en Tierra del Fuego (obra que hoy esta ralentizada y sin mayores novedades sobre su continuidad) que tiene como finalidad ser una puerta de entrada al continente antártico para el país y para terceros, y que se combinará con la recuperación y modernización integral de la base antártica Petrel cuyas características la tornan una pieza estratégica en la política Antártica Argentina.
En este sentido la estrategia británica en el Atlántico Sur busca por un lado apuntalar la proyección de Londres sobre el continente antártico, donde los reclamos territoriales si bien están contenidos por el marco del tratado antártico, vale resaltar que los de Gran Bretaña se superponen casi en su totalidad con los de nuestro país y con buena parte del área ambicionada por Chile. El tratado antártico y sus protocolos si bien no caducan, podrán ser revisados a partir del 2048, quedando la puerta abierta a posibles reformas en cuanto al tipo de actividades que podrían permitirse, entre ellas posibilidades de exploración y explotación de recursos, con el trasfondo de la disputa geopolítica entre China y EEUU donde los recursos naturales tienen un papel central. Llegar a esta instancia desde una posición de fortaleza será fundamental para los actores con intereses en dicho continente y el Reino Unido tomo ya nota de ello.
Por otro lado, la construcción de un puerto de aguas profundas en las islas permitirá al gobierno de ocupación avanzar con sus proyectos extractivistas en los espacios marítimos usurpados, tanto en materia pesquera (la principal fuente de ingresos de las islas) pero en especial los relacionados a los hidrocarburos, además del potencial uso militar de dicha infraestructura.
Ante esta situación extremadamente grave y amenazante para los intereses argentinos en una región geopolítica de máximo interés para el país, sorprende la pasividad e indiferencia con la que las autoridades nacionales tomaron el asunto, las reacciones además de notoriamente tímidas fueron por lo general forzadas y tardías. La estrategia a seguir por parte del gobierno de LLA en torno la cuestión Malvinas se basa en el retorno de la formula del “paraguas de soberanía”, artificio por el cual el reclamo en materia de soberanía queda relegado en favor de consideraciones económicas y comerciales que poco y nada benefician a la Argentina pero mucho al ocupante británico quien ve de esta manera abaratados los costos de la usurpación, tal como quedó demostrado en experiencias pasadas tanto durante el menemismo (acuerdos de Madrid de 1989) como durante el macrismo (comunicado conjunto Foradori-Duncan en 2016).
Esto constituye un claro ejemplo mas del relajamiento en materia de reclamos con respecto a la histórica disputa con Gran Bretaña y de ejercicio de soberanía en general, decisiones que están sintonía con otras medidas tales como la polémica entrega de la gestión de la vía de navegación troncal del Paraná (mal llamada Hidrovia) alejercito de los Estados Unidos, los intentos de desmantelamiento del Régimen Federal de Pesca (Ley 24.922) y de la denominada “Ley de tierras Rurales” (Ley 26.737) que habilitan la extranjerización de las tierras e incluso de cursos de agua, a lo que se suman otras propuestas del espacio “libertario” tales como las del diputado Benegas Lynch de “privatizar el mar argentino”, no casualmente también con un pretexto ambientalista igual que las AMP decretadas por los británicos.
Los que si levantaron la voz
La pasividad del gobierno argentinoen torno a Malvinas contrastó notablemente con el activo respaldo a los derechos argentinos realizado por los países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) durante la reciente VIII cumbre realizada en San Vicente y las Granadinas. Dentro de este bloque de países esta Venezuela, país que reafirmó una vez más su respaldo al reclamo de soberanía argentino, y quien además también es acosado por la política de injerencia británica tal como lo demuestra el envió de un buque británico HMS Trent ( gemelo del que patrulla las aguas usurpadas en el Atlántico Sur) a la disputada y codiciada región del esequibo, otro legado del colonialismo británico en la región.
No obstante este apoyo regional, tanto el gobierno de Milei como por entonces el de Mauricio Macri rehusaron participar de la CELAC a la cual incluso se evito enviar representantes. En conclusión la agenda de la política exterior del gobierno de Javier Milei esta claramente mas influenciada por los intereses geopolíticos de los Estados Unidos y socios estratégicos como Israel (país que ha votado reiteradas veces contra el reclamo argentino en el marco de la ONU y cuyas empresas participan de la explotación petrolera ilegal en Malvinas) que por autenticas consideraciones de interés nacional.
El ex canciller macrista y actual embajador en Chile, Jorge Faurie, tuvo palabras desafortunadas que generaron un roce diplomático con el país vecino. El nivel de la diplomacia argentina pasa por uno de sus peores momentos.
Congresistas chilenos rechazaron este viernes (22.03.2024) la postura del embajador de Argentina, Jorge Faurie, después de que se diera a conocer un incidente del diplomático con funcionarios de Chile en el paso fronterizo de ‘Los Libertadores’, el más cercano a Santiago.
“Mi país ya era potencia agrícola mientras ustedes recién aprendían a comer”, habría sido una de las frases polémicas del embajador de acuerdo con el diario local chileno El Mostrador, el primero en difundir la noticia. Asimismo, diplomáticos de Chile denunciaron que Faurie habría despreciado el puesto de delegado, ya que al parecer dijo que la consideraba una figura sin utilidad que su país no reconocía.
Faurie formaba parte de una delegación argentina que, junto a otra chilena, recorrieron el Área de Control Integrado (ACI) del citado paso, donde trabaja personal a cargo de los controles fronterizos de Aduanas y Migraciones de ambos países, además de agentes del Servicio Agrícola Ganadero (SAG) de Chile. El objetivo de la visita era estudiar las medidas bilaterales que se podían poner en marcha para agilizar el tránsito de personas y vehículos de carga.
En este contexto, el diputado del Partido Socialista (PS), Nelson Venegas, pidió este viernes “la salida inmediata” del embajador, “por desconocer las políticas que se ejercen en nuestra República, mirando en menos a las autoridades que son nombradas por el presidente, en este caso Gabriel Boric, además de faltar el respeto de la estructura gubernamental que impera hoy en el territorio nacional”.
En tanto, el senador Iván Moreira, de la ultraconservadora Unión Democrática Independiente (UDI), sostuvo que “el embajador de Argentina fue muy impertinente” y que “sabemos el estilo de Javier Milei, pero eso no puede ser una estrategia permanente de Argentina de malos entendidos o más bien de generar, a través de la política exterior, una acción que tiene beneficios de la política interna”, aunque no reclamó su salida.
Por su parte, el diputado Stephan Schubert, del partido ultraderechista Republicanos, instó a Argentina “a respetar las autoridades chilenas” y pidió que “el embajador se pueda disculpar por cuanto las autoridades chilenas deben ser respetadas, así como también nuestro pueblo”.
Este es el segundo incidente que se produce en apenas tres meses, después de que en enero pasado se acusara al embajador argentino de haber declarado que las relaciones de Argentina y Chile son un “desastre” a nivel bilateral.
La expresidenta recordó la recuperación de la ex-ESMA en 2004 y trazó un paralelismo con el bombardeo a la Plaza de Mayo en 1955.
En el Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia, la ex presidenta compartió unas palabras a través de su cuenta de Twitter e hizo hincapié en la decisión del entonces presidente, Néstor Kirchner, de recuperar la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) para convertirla en un sitio de memoria.
En el inicio de su publicación recordó que hace 20 años acompañó al presidente, Néstor Kirchner, “al acto de recuperación de lo que fuera el mayor centro clandestino de detención de la Dictadura cívico-militar iniciada el 24 de marzo de 1976, la ESMA”, y adjuntó fotos de esa histórica fecha.
Un día como hoy, hace 20 años, acompañé al Presidente Néstor Kirchner al acto de recuperación de lo que fuera el mayor centro clandestino de detención de la Dictadura cívico-militar iniciada el 24 de marzo de 1976, la ESMA.
La ex vicepresidenta consideró que la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) es “tal vez, el lugar más emblemático de la tragedia política, económica y social que envolvió a todos los argentinos en aquellos años” y advirtió: “De la que, aún hoy, sufrimos las consecuencias”.
La ex presidenta ubicó a la última dictadura de 1976 como una consecuencia de otros actos criminales contra el pueblo argentino.
“No fue la primera. En junio de 1955, durante el segundo gobierno del General Perón, aviones de las Fuerzas Armadas argentinas, piloteados por argentinos, descargaron toneladas de bombas sobre otros argentinos y argentinas que circulaban en un día normal de trabajo por la Plaza de Mayo y sus alrededores, provocando cientos de muertos y miles de heridos. No se recuerda en la historia universal ningún hecho de similar naturaleza” relató Cristina.
Y reflexionó: “siempre me pregunté -todavía lo hago-, si el debido castigo de estos actos -como en cualquier país “de bien”-, hubiera permitido evitar la tragedia de la última Dictadura militar. A pesar de que sé que es absolutamente contrafáctico, sería bueno que todos pudiéramos reflexionar sin dogmatismos ni odios cómo es que llegamos hasta acá”.
Por último, la ex presidenta ponderó la importancia de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia. “Para aquellos que todavía se niegan a reflexionar y que tanto admiran todo lo que viene de “afuera”, en el mundo han saldado la discusión respecto de lo que pasó en Argentina durante la última Dictadura cívico-militar: el 19 de septiembre de 2023, el Museo Sitio de Memoria ESMA – ex centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio de Argentina fue incorporado a la Lista de Patrimonio de la Humanidad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)”.