El jueves 20 de abril en la ciudad de La Plata, el presidente Alberto FernÃĄndez y el gobernador Axel Kicillof lanzarÃĄn oficialmente el proceso licitatorio.
Finalmente llegÃģ la hora. La cita es el 20 de abril a las 11 en la ciudad de La Plata. Cumpliendo la promesa efectuada el 1 de marzo en la apertura de sesiones del Congreso Nacional, el presidente Alberto FernÃĄndez anunciarÃĄ oficialmente el llamado a licitaciÃģn nacional para la obra de apertura del Canal Magdalena.
La elecciÃģn de la ciudad de La Plata y la presencia del gobernador bonaerense Axel Kicillof no son casuales. El mandatario provincial fue uno de los principales impulsores de esta obra que apunta a mejorar la logÃstica argentina.
En una primera etapa, se licitarÃĄ la obra de apertura, y cuando ÃĐsta comience, serÃĄ el turno del balizamiento. La selecciÃģn del contratista para el mantenimiento del canal quedarÃĄ para el prÃģximo gobierno.
Juan Pablo Trujillo, CEO de TecPlata, en reportaje concedido a Transport & Cargo, seÃąalÃģ que “le llamaba la atenciÃģn que una obra como la del Canal Magdalena tuviese detractores”.
Lo cierto es que ellos existen y esgrimen como principal argumento el costo de esta obra y la falta de oportunidad para realizarla.
Seguramente las dos partes de esta grieta que generÃģ el Canal Magdalena coincidan en un hecho mayor: en algÚn momento la Argentina debe llegar a los 40 pies de calado para una mejor salida de la agro exportaciÃģn.
Desde este concepto en comÚn, hay que decir que es notablemente mÃĄs econÃģmico alcanzar esa profundidad por la vÃa del ParanÃĄ GuazÚ, el Canal Buenos Aires y el Canal Magdalena.
Aquà no se habla de conceptos mÃĄs abstractos como la soberanÃa sino de nÚmeros concretos. Porque los metros cÚbicos a extraer en esta nueva traza navegable son la mitad de los que habrÃa que sacar para alcanzar esa profundidad en la vÃa actual. Y ni hablar del dragado de mantenimiento que serÃa infinitamente menor.
En el caso puntual de la obra que se va a licitar, son muchos menos metros cÚbicos a extraer de cero para llevar el Canal Magdalena a 40 pies que los que habrÃa que dragar para logra la misma profundidad en el Canal Punta Indio que ya posee 34 pies. Esto es asà porque su extensiÃģn es mucho mayor. Y en este escenario ni siquiera se considera que profundizar el Canal Punta Indio implicarÃa extenderlo hasta cruzarlo con el acceso al puerto de Montevideo, o sea un imposible.
Entonces, es bueno que los defensores del Canal Punta Indio sepan desde ya que por esta vÃa jamÃĄs se accederÃĄ a los 40 pies. Y que el Canal Magdalena en pocos aÃąos se pagarÃĄ solo por su escaso dragado de mantenimiento, y que por allà sà se alcanzarÃĄ el calado con el que sueÃąa la agro exportaciÃģn.
NOTABLES VENTAJAS
El Canal Sur, como se denominÃģ en algÚn momento, o el Canal Magdalena, ya se utilizaba en el siglo XVII para el ingreso al RÃo de la Plata.
Hoy, sin embargo, la salida al mar del realiza por el Canal Punta Indio, una vÃa navegable contra natura y a todas luces impropia.
El 65 % del tiempo de demora de toda la VÃa Navegable Troncal se localiza en el Canal Punta Indio con el lÃģgico impacto econÃģmico en los precios que recibe el productor del bien a exportar o el que debe pagar el consumidor final de un bien importado. Esto es asà porque es un canal de una sola vÃa y con un escaso ancho de solera de 100 metros.
Esta vÃa navegable se presenta entonces como una suerte de cuello de botella para la navegaciÃģn porque, como un efecto dominÃģ, impacta sobre los otros buques que se encuentran navegando y genera una multiplicaciÃģn de tardanzas. A esto se suman las reservas de canal que realizan determinados buques por razones de seguridad, tamaÃąo o tipo de carga, las que tambiÃĐn paralizan temporalmente la circulaciÃģn.
Por ser una de una sola vÃa y alternada, el sobrepaso o el cruce de barcos estÃĄ limitado y, por lo tanto, su trÃĄfico debe ser coordinado con el Sistema de Control de TrÃĄfico y Seguridad (CONTRASE) de la Prefectura Naval Argentina (PNA).
En su diseÃąo, el Canal Magdalena posee diferencias fundamentales respecto al actual de Punta Indio, y representa beneficios indiscutibles para la Argentina. Sus 150 metros de ancho de solera permiten un canal de doble
En este sentido, la ubicaciÃģn del Canal Magdalena acompaÃąa el sentido de las corrientes de marea y coincide con su direcciÃģn, lo cual genera una menor carga de sedimentaciÃģn y requiere, en consecuencia, menores gastos de mantenimiento en el dragado.
Al mismo tiempo, la contrataciÃģn de cualquier servicio desde el puerto demanda un contrato de despacho con una agencia marÃtima que, a partir del proyectado Canal Magdalena, registrarÃa dicho ingreso en el paÃs.
Fuente: El Cronista