La mayoría de los trabajadores del Conurbano se opone a la reforma laboral de Macri
El 54% considera que el proyecto del Gobierno va a afectarlo en su trabajo. La cifra trepa al 63% entre los más jóvenes. En cuanto a la reforma previsional, casi la mitad cree que las jubilaciones deben continuar actualizándose con los criterios fijados por la Ley de Movilidad Previsional vigente, contra un 26,8% que acepta el ajuste por inflación.
Una encuesta de Analogías reveló la percepción de los habitantes del Gran Buenos Aires sobre las reformas impulsadas por el Gobierno de Mauricio Macri, tanto en lo laboral, previsional como tributario.
El estudio, realizado entre el 5 y 7 de noviembre en los 28 municipios que integran el área metropolitana de Buenos Aires, relevó 2.120 casos de forma telefónica.
La primera impresión entre los vecinos del Conurbano respecto a las reformas es que benefician en una medida mucho mayor a los grandes empresarios. Alrededor del 50% tiene esta opinión y la cifra se eleva entre los jóvenes y adultos de hasta 44 años, así como en el segmento de mayor nivel de estudios.
La reforma laboral parte de un contexto adverso en lo que refiere a percepción de la situación laboral personal: un 41,5% cree que ésta empeoró durante el último año, contra sólo un 19,9% que afirma haber mejorado.
El 54% de los entrevistados considera que la reforma laboral propuesta por el Gobierno va a afectarlo en su trabajo, con una cifra que sube al 63% entre los más jóvenes.
En tanto, un 48,4% de los vecinos del Gran Buenos Aires no cree que la reforma laboral vaya a acelerar la llegada de inversiones, como sostiene el Gobierno, mientras que un 37% tiene expectativas al respecto.
En cuanto a la reforma previsional, un 45,7% de los entrevistados considera que las jubilaciones deben continuar actualizándose con los criterios fijados por la Ley de Movilidad Previsional vigente, contra un 26,8% que cree que deben ajustarse por inflación exclusivamente.
Por otro lado, el 50,4% de los habitantes del GBA desconfía sobre la posibilidad de que la CGT defienda a los trabajadores y jubilados en caso de que la reforma los perjudique.
Finalmente, el 52,7% se opone al proceso de endeudamiento del sector público (Gobierno y Banco Central) porque asegura que complica la actividad económica, mientras que un 48,7% se muestra en desacuerdo con que el FMI audite las cuentas de la economía argentina.
El desacuerdo trepa al 84% entre votantes de Unidad Ciudadana y al 67% entre los del FIT. En tanto, resulta más bajo aunque también mayoritario en votantes de Massa (58,1%) y Randazzo (57,6%) y sólo se vuelve minoritario (22,3%) entre los que optaron por Cambiemos en las elecciones de Octubre.